El franco-iraní que mató a cuchilladas a un turista en París, cerca de la Torre Eiffel, el pasado sábado, asumió y reivindicó "totalmente su gesto". Asimismo, fuentes de la investigación lo describieron como "muy frío", "clínico" y "desencarnado" e informaron que "todo hace pensar que actuó solo".
Armand Rajabpour-Miyandoab, de 26 años, que recientemente había jurado lealtad al Estado Islámico (EI) también afirmó durante su detención que había actuado como "reacción a la persecución de los musulmanes en el mundo".
Rajabpour-Miyandoabun dijo en árabe en un video que aportaba "su apoyo a los yihadistas actuando en varias zonas", según declaró el domingo el fiscal antiterrorista, Jean-François Ricard.
Además, su cuenta en la red social X incluía "numerosas publicaciones sobre Hamás, Gaza y de forma más general sobre Palestina", agregó el magistrado.
La madre del atacante había expresado a finales de octubre su preocupación sobre el comportamiento de su hijo, fichado por radicalización y liberado en 2020 tras una condena de 5 años en la cárcel por un proyecto de acción violenta. "Había sido sometido a una orden de tratamiento médico", contó la mujer.
En ese sentido, el ministro francés del Interior, Gérald Darmanin, dijo a la cadena BFMTV: "Hubo manifiestamente un fallo psiquiátrico, los médicos consideraron en varias ocasiones que iba mejor".
"Originario de una familia sin compromiso religioso", Rajabpour-Miyandoab se convirtió al islam a los 18 años, en 2015, y "muy rápidamente" se volcó en "la ideología yihadista", según el fiscal.
"La creación de esta cuenta X a principios de octubre, y la inquietud el mismo mes de la madre pueden hacer pensar en un acto preparado desde hace varias semanas", analizó otra fuente cercana al caso.
El agresor y un miembro de su entorno seguían bajo custodia policial la tarde del lunes. El hombre franco-iraní podría permanecer detenido hasta el miércoles por la noche, con motivo de la investigación antiterrorista.
El ataque
El ataque ocurrió cerca de la Torre Eiffel el sábado por la noche, a pocos meses de los Juegos Olímpicos de París y en momentos en que el país se mantiene con un nivel elevado de alerta por el aumento de tensiones debido a la guerra entre Israel y Hamás.
Según una fuente cercana a la investigación, el agresor dijo que eligió llevar a cabo su ataque allí porque es un "lugar simbólico" y "no podía soportar que estuviera iluminada con los colores de Israel".
El turista asesinado, de 23 años y con nacionalidad alemana y filipina, recibió dos golpes de martillo y cuatro cuchilladas. El joven atacante también golpeó con un martillo a dos hombres, un francés de 60 años y un británico de 66, ambos heridos leves.
Tras advertir lo sucedido, la policía utilizó una pistola de descarga eléctrica para inmovilizarlo.
Además, la fiscalía federal alemana informó hoy que había abierto una investigación por atentado, justificada por la nacionalidad alemana de la víctima.