Florencia Aranguren fue asesinada a puñaladas este miércoles en la playa José Gonçalves, de la ciudad de Buzios, en Brasil. Amante de los animales, viajera, trapecista e ilustradora, la joven de 31 años había llegado apenas tres días antes al reconocido balneario brasileño para radicarse allí. El sospechoso se encuentra detenido.
Tronco, el perro de la víctima, que se encontraba con ella al momento del homicidio, fue llevado a una veterinaria y quedó a cargo de un amigo. Florencia era una amante de los animales y llevaba a su mascota a todos lados. Un día antes del crimen, lo había acercado a una clínica veterinaria para que lo examinaran, según informó el medio local O Globo.
Unas semanas atrás, el pasado 20 de noviembre, Florencia había cumplido sus 31 años. Antes de mudarse a Brasil vivió unos años en España. Pero no era la primera vez que visitaba el país carioca: en octubre ya había viajado a Buzios para reencontrarse con una amiga, Macarena Sánchez.
En aquel entonces, su amiga publicó en sus redes sociales: “Para vos que cruzaste un océano para abrazarme y conocerme de nuevo. Gracias. Una amistad como ninguna, tenerte estos días acá fueron el mejor regalo, cada palabra que compartimos”. Este miércoles, Macarena fue convocada para reconocer el cuerpo.
A Florencia también le gustaban los piercings y dedicaba parte de su tiempo a dibujar. Sus ilustraciones a mano las subía a sus redes sociales y su amiga Macarena las convertía en tatuajes. Además, Florencia practicaba acrobacias sobre trapecio. En Buenos Aires, asistía a clases en un grupo liderado por la trapecista Miss Marine Blue –Marina Isarelli–.
Qué se sabe del crimen de Florencia Aranguren en Buzios
Un lugareño encontró el cuerpo alrededor de las 8 de la mañana de este miércoles en un sendero de la playa José Gonçalves, en Armação dos Búzios, en la Región de los Lagos de Rio. Rápidamente dio aviso a las autoridades. El perro de la víctima estaba atado al cadáver.
Según los agentes de la Guardia Municipal, el cuerpo de la víctima presentaba marcas de puñaladas, por lo que se dio aviso a la Policía Militar, quien encontró al sospechoso, que fue finalmente arrestado.
Según los primeros informes, el posible asesino de la joven argentina había saltado a un condominio cercano al lugar del crimen y se estaba lavando.
La Guardia Municipal lo aprehendió y trasladó a la escena del crimen. La mascota de la joven argentina no había reaccionado a ninguno de los presentes, hasta que apareció el delincuente y se mostró visiblemente inquieto y violento. El animal, que estaba cubierto de sangre, fue entregado a un amigo de la víctima.
El sospechoso tiene dos antecedentes penales, por robo y lesiones. Fue trasladado a la Comisaría 127, donde quedó registrado el caso, mientras que a Policía Civil comenzó la investigación petinente en el lugar del deceso.
El cuerpo de la joven argentina fue enviado al Instituto Médico Legal, que se encuentra en Cabo Frío, ciudad vecina.