La asunción de Javier Milei como presidente de la República Argentina no solo estuvo marcada por el cambio de liderazgo, sino también por un instante inesperado que capturó la atención de todos, especialmente de la exvicepresidenta Cristina Kirchner.
Durante la ceremonia de juramentación, Milei, siguió el protocolo y juró "por Dios y por la patria sobre los santos evangelios". Posteriormente, recibió de manos del presidente saliente, Alberto Fernández, la banda y el bastón de mando. Sin embargo, el momento que generó sorpresa y distensión fue cuando el presidente decidió mostrarle a Cristina Kirchner la imagen tallada en su bastón presidencial.
En un gesto insólito, el líder ultraderechista reveló que la empuñadura del bastón lleva grabadas las huellas de sus cinco perros como un emotivo homenaje. La reacción de Cristina Kirchner, que fue capturada en varias imágenes, muestra una sonrisa cómplice ante la peculiaridad del gesto de Milei.
El gesto inusual del presidente entrante reflejó una conexión momentánea entre ambos líderes políticos, rompiendo con la formalidad y agregando un toque de humor a la jornada.
Es que el presidente entrante rompió esquemas con la elección de una simbología única al rendir homenaje a sus "hijos caninos". Conan, la primera mascota de Milei, y sus cuatro clones, llevan nombres inspirados en economistas reconocidos como Robert, Milton, Murray, Conan y Lucas.
La relación especial de Milei con sus perros es un tema recurrente en sus entrevistas, donde expresó que Conan, su primera mascota, fue más que un amigo, un confidente cercano que siempre lo apoyó.