Un grupo de 47 brasileños y sus familiares palestinos, que recibió autorización del gobierno de Egipto para salir de la Franja de Gaza, llegó este lunes en Brasilia en un avión de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) procedente de Egipto.

Son 27 menores de edad, 16 mujeres --incluyendo a dos ancianas-- y cuatro hombres adultos que vivían en Palestina y recibieron autorización para ingresar a Egipto el sábado, tras intensas gestiones del Gobierno brasileño, informó la Presidencia  de Brasil. El gobierno egipcio mantiene cerrada la frontera para no trasladar el problema palestino a su país y evitar el avance de Israel en la Franja de Gaza. Al gobierno de Israel le convendría la apertura de la frontera porque le permitiría cumplir su objetivo no declarado de vaciar de palestinos ese territorio.

Los repatriados

De los rescatados, once tienen doble nacionalidad brasileño-palestina y los otros 36 son familiares palestinos de ciudadanos brasileños. Este es el segundo grupo de brasileños y familiares que vivía en Palestina repatriado por Brasil, tras otro de 32 personas que llegó al país el 13 de noviembre, después de haber pasado tres semanas esperando la autorización para ingresar a Egipto.

Según la Presidencia de Brasil, hasta ahora 1.524 brasileños y sus familiares que manifestaron el deseo de abandonar Israel o Palestina en medio de la guerra, ya fueron trasladados a Brasil en once vuelos de la FAB.

Los nuevos repatriados desembarcaron en Brasilia y permanecerán al menos dos días en la capital brasileña, donde recibirán apoyo médico y psicológico y completarán sus trámites de regularización en el país.

"Algunos dijeron que irán a casas de familiares y amigos, pero los que no tengan referencia serán recibidos en instituciones que pueden ofrecerles alojamiento, alimentación y un soporte para que puedan reconstruir sus vidas", afirmó el secretario nacional de Asistencia Social del Ministerio de Desarrollo Social, Andre Quintão.

Una nueva vida en Brasil

Algunos repatriados afirmaron que esperan recomenzar sus vidas en Brasil, lejos del conflicto y con seguridad para sus hijos. "La situación en Gaza es muy difícil. Bombardearon nuestra casa. Nos quedamos sin comida y sin lugar fijo para dormir. Allá te vas a dormir sin saber si despertarás o no. Perdí muchos amigos, mi tía y los hijos de ella", afirmó Yasmeen Rabee.

Tras la primera evacuación de brasileños en Palestina, Brasil solicitó autorización para rescatar otras 102 personas, pero a 24 les fue negada la autorización para abandonar Gaza, entre los cuales siete tienen doble nacionalidad brasileña-palestina. Además de los 24 que no fueron autorizados, otros 31 desistieron del viaje para quedarse con sus familiares.

"Con eso permanecen en Gaza unos 30 brasileños en las ciudades de Gaza y Rafah y en los campos de refugiados de Nuseirat y Maghazi. Seguiremos atentos a su situación y ofreciéndoles toda la asistencia posible", afirmó el embajador Alessandro Candeas, uno de los integrantes de la representación brasileña en Cisjordania.