El dólar blue subió a 1000 pesos en el primer día hábil de Gobierno de Javier Milei, mientras que los dólares financieros como el contado con liquidación y el MEP finalizaron en una cifra casi idéntica. La bolsa porteña aumentó por encima del 3 por ciento, aunque en Nueva York hubo acciones argentinas que registraron pérdidas de más del 2 por ciento. Los bonos soberanos en moneda extranjera se negociaron con pérdidas también de hasta 2,4 por ciento.

En el virtual feriado cambiario casi nadie pudo comprar dólares, salvo en cuestiones de necesidad y urgencia, que, incluso en esos casos, tuvieron que ser aprobadas por el Banco Central.

La principal incógnita en el mercado es cómo se moverá el dólar oficial durante las próximas horas o días, luego de los anuncios que se postergaron hasta este martes. “No hay dudas que la gestión de Milei hará una devaluación inicial. La clave será su magnitud y si será una de jure o una sui generis, como las que se dieron en los últimos meses de la gestión Fernández, con Massa a la cabeza de la cartera de Economía”, planteó un informe de Portfolio Personal.

Se mencionó que uno de los desafíos a contemplar es que los exportadores no tendrían incentivos a liquidar ante la expectativa de la devaluación que lleve a la unificación cambiaria. “Los esquemas de tipo de cambios múltiples demostraron ser insostenibles en el tiempo, por lo que sólo servirían como achicamiento de la brecha, al menos en lo más inmediato”, se indicó.

Los inversores, más allá del plano cambiario, están intentando entender la estrategia de fondo del nuevo Gobierno. “Existe incertidumbre no sólo sobre los detalles del plan económico (algo esperable) sino también si se trata de un plan de estabilización o solamente de la primera etapa de un plan que culminaría en la dolarización y en el cierre del Banco Central (una de las principales banderas de campaña)”, aseguró un informe de la consultora 1816.

La percepción del mercado sobre este punto resultará clave para el recorrido de los activos bursátiles en las próximas semanas. Si se percibe que todo es parte de una transición, no habrá incentivos a tener bonos soberanos en moneda local e impulsaría una corrida contra el peso.

El documento de la consultora 1816 plantea, no obstante, que las señales hasta el momento van en sentido contrario. Esto se debe a que el nuevo ministro de Economía, Luis Caputo, le habría dicho a los bancos que no avanzará en un plan de dolarización en lo inmediato, Milei le quito énfasis al punto en las entrevistas y principalmente Ocampo no fue elegido al frente del Banco Central.

Para las próximas semanas, además de las definiciones del programa monetario y financiero, los inversores esperan también anuncios sobre la llegada de fondos frescos del exterior. La posibilidad de tener dólares de deuda para poder hacer frente a las presiones en el tipo de cambio financiero modifica en una gran parte el armado de los posibles escenarios económicos a mediano plazo.

En este punto se debe tener en cuenta que el riesgo país de la Argentina, más allá de las subas de los títulos públicos en moneda extranjera en los últimos 20 días, sigue cerca de los 2000 puntos. La contracara es que Estados Unidos tendría en carpeta ablandar la política monetaria en el mediano plazo.

Tasa de interés internacional

Se espera que la Reserva Federal de Estados Unidos no continúe con una política de suba de tasas de interés, aunque la baja de los rendimientos recién llegaría para la segunda mitad del próximo año.

Durante este miércoles la autoridad monetaria estadounidense dará a conocer si mantiene la tasa de interés en el rango de entre 5,25 y 5,5 por ciento actual, algo que en el mercado casi se da por descontado. Se trata de la última reunión del año para definir rangos de tasa de interés.

El último dato de inflación de Estados Unidos correspondiente a octubre registró una cifra del 0,4 por ciento mensual y del 3,2 por ciento interanual, por debajo del 3,7 por ciento de septiembre. De esta manera, se espera que la inflación continúe en ese sendero de desaceleración y ronde la cifra de 3,1 por ciento en el informe que se publicará este martes, con los datos de noviembre. 

El presidente de la Fed, Jerome Powell, afirmó que "es probable que aún no se hayan sentido todos los efectos de nuestro endurecimiento", en referencia a las elevadas subas de tasa dispuestas en 2022 y 2023.