El ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, reelegido por el Gobernador para integrar el Gabinete, Andrés “Cuervo” Larroque, se refirió este martes a la reasunción de Axel Kicillof al mando de la Provincia de Buenos Aires y aseguró que su discurso ante la Asamblea Legislativa fue “histórico”. Habló sobre su futuro dentro del peronismo, ahora como oposición, y de la relación que deberán mantener con Javier Milei y sus ministros.
Lo que dejó la asunción de Kicillof
Larroque aseguró que su discurso ante la Asamblea Legislativa fue “valiente, esclarecedor y responsable”. Sobre todo, teniendo en cuenta “el contexto que toca”, que tiene que ver, se entiende, con un Gobierno nacional de otro tinte político: antagónico con el peronista, y que buscará que el ajuste fiscal sea el eje de la gestión.
“Puso luz en un momento muy oscuro. Fue un discurso brillante, sin renunciamiento. Esto necesita el 45 por ciento que acompañó a Massa y la militancia en general. Y en el futuro no muy lejano, gente que se va a decepcionar y chocar con una realidad que no esperaba. Son de esos hitos que vamos a referenciar como el momento en el que comenzó a marcarse una mirada distinta a lo que hoy todos respetamos, porque surge del voto popular, pero que no podemos dejar de marcar diferencias”, señaló.
El peronismo como oposición
Por otro lado, habló sobre la situación en la que quedó la gestión bonaerense respecto al armado de la oposición a nivel nacional. Reconoció que el hecho de gestionar la provincia más grande y numerosa del país implica un desafío del que no se van a correr. Y que eso fue algo que quedó claro tras la intervención de ayer del Gobernador, ya no en la legislatura, sino en la plaza y ante los seguidores allí presentes.
“Yo creo que ayer era un día muy complejo. Por eso marco el discurso como histórico, que con el tiempo lo vamos a ir viendo en la perspectiva histórica que tiene. Es un momento muy complejo. Cada palabra podría tener un sentido hacia un lugar u otro. Y el Gobernador asumió el desafío con valentía. Él no se corre de las responsabilidades”, comenzó señalando.
Y añadió: “Se enmarca en el peronismo y en una fuerza que no se puede preocupar solamente por los problemas locales de la provincia. Un destino común requiere una mirada solidaria con el resto del país. No es una tarea solo de Axel. Sin dudas él quedó posicionado en un lugar importante y asumió ese desafío”.
La relación con el Gobierno nacional
Larroque reconoció que en este contexto, tampoco para el nuevo oficialismo la Provincia de Buenos Aires será una “isla”. “Tendremos diálogos con los funcionarios nacionales para ver qué mirada tienen y qué piensan sobre esta provincia, que es la más poblada y presenta mayores asimetrías”, remarcó.
Y lo que añadió: “Es la que más aporta al Producto Nacional y la que menos recibe. Ahí hay una situación de injusticia que hay que resolver. Se aporta un 40 por ciento y se recibe un 22 por ciento. Y no es voluntad de la provincia quedarse con todo lo que genera, pero sí que haya una distribución más justa. Porque es ahí donde se explican las asimetrías”.