El domingo 3 de diciembre el hijo de 6 años de edad de Diana Ferreyra fue atropellado por un camionero y aunque lo llevaron al Centro de Salud, falleció sin atención de un médico, mientras era trasladado al Hospital de la localidad de Embarcación, en el norte salteño.
“Cuando llegué todos gritaban ‘que consigan un médico’ porque el del pueblo no estaba y el gerente, que debe estar de guardia, tampoco contestaba", contó Ferreyra. A ello sumó que mientras enfermeros y enfermeras asistían a su hijo, guiados por teléfono por un médico, su hermano salió gritando “no hay oxígeno. Consigan oxígeno”.
Además, dijo que cuando finalmente comenzaron el traslado, el chofer de la ambulancia “estaba desesperado” y “esperaba que la ambulancia no se le rompa porque no se cuál desperfecto tenía en la rueda”.
El pequeño falleció mientras era trasladado al Hospital San Roque de Embarcación, a casi 100 kilómetros de Fortín Dragones, pueblo que está comprendido en su jurisdicción municipal, en el departamento San Martín.
“El niño tuvo un traumatismo torácico abdominal que le produjo la muerte”, dijo a Salta/12 el gerente del Hospital de Embarcación, Facundo Orosco, quien ayer renunció a la gerencia.
Orosco afirmó que en la zona hay 9 puestos sanitarios con guardia de enfermería las 24 horas. “El médico trabaja mañana y tarde. Pero los domingos no”, explicó al indicar que en caso de urgencias los que atienden son los médicos de guardia del Hospital únicamente. Mientras que en los puestos sanitarios los profesionales van para hacer consultorio. El médico sostuvo que había oxígeno y estaba en la ambulancia, y ratificó que el equipo de enfermería de ese puesto actuó de manera inmediata.
El fin de semana último, ante los hechos acontecidos, hubo una asamblea en la plaza del pueblo de Fortín Dragones, ahí se expuso que todos los parajes tienen el mismo problema: la falta de médicos de manera constante. Además de vecinos y vecinas de Hickman y Fortín Dragones, también se manifestaron referentes de comunidades originarias.
El año pasado Diana Ferreyra fue la voz denunciante de la situación de Zaira, una nena indígena que a raíz de una enfermedad estaba postrada en una cama. La niña falleció hace un año a raíz de la enfermedad crónica que tenía, cuando estaba siendo atendida en el Hospital Materno Infantil de la ciudad de Salta, lo que sucedió gracias a la denuncia de la pobladora de Fortín Dragones.
Los hechos
Ferreyra contó que el domingo 3 de diciembre a las 17.30, su hijo jugaba a la pelota en un baldío con otro nene de 9 años. “El baldío está cerrado. Pero se le fue la pelota y entonces él salió a buscarla. Parece que estaba de espaldas y fue cuando el camión lo atropelló”, detalló.
En ese momento, el otro niño le dijo “a tu hijo lo mataron”. Ella pensó que era una broma, pero el chico empalideció y se desmayó. “Salí corriendo pero mi pareja me detuvo. Vi a mi hijo al costado de la vereda. El camionero paró 150 metros más adelante. Se bajó, se agarró la cabeza, y se fugó”, contó.
Otro vecino trasladó al niño atropellado en auto hasta el Centro de Salud del pueblo, donde no había médico. La enfermera de guardia realizó las primeras curaciones guiada por un médico. Después lo subieron a la ambulancia pero el nene falleció en el traslado.
El camionero se entregó más tarde pero “escondió el camión”, que al momento del siniestro transportaba vacas. “Se sabe que ese es un camión que no tiene bien los frenos. Primero él se entregó y después entregaron el camión y eso no tendría que haber sucedido”, dijo la madre. Por ahora el camionero fue imputado.
Otros casos
Diana es una de las voceras de las constantes fallas en la atención de la salud en la zona. Por ella se conoció el caso de Zaira, una nena wichí con una enfermedad crónica que le generó una postración. La nena estaba en situación de abandono en una habitación sin condiciones para su cuidado. Tras la denuncia de Diana se logró que la nena fuera atendida en el Hospital Materno Infantil, donde falleció el 11 de diciembre del año pasado.
Otro caso denunciado por Ferreyra fue el de Griselda, una nena de un poco más de dos años, también del Pueblo Wichí, que falleció a raíz de un estado de desnutrición a mitad del año pasado. En ese caso, la niña sufrió una crisis durante un fin de semana y cuando su familia requirió atención en el Centro de Salud les dijeron que debían sacar turno el lunes siguiente. La niña murió el domingo.
“También logramos sacarlo a Pascual Arias, un abuelito que estaba muy abandonado, cieguito, que estaba abandonado por todos. Logramos que lo lleven a un hospital y que lo asistan. Dormía en una habitación vacía con una cama sin colchón con estado de desnutrición gravísimo”, contó Diana al recordar un tercer caso por el que intercedió.
Ferreyra indicó que frente al histórico reclamo de atención de salud con la presencia de médicos y médicas, incluídos los fines de semana, decidieron que van a tomar el Centro de Salud de ese pueblo si siguen sin respuestas. Inicialmente la toma se había previsto para ayer, pero finalmente se contentaron con reunirse a la espera de respuestas del Ministerio de Salud, que, según les dijeron, recién podrían llegar la otra semana.
“Quiero que todos los vecinos se unan a esta lucha. Cuando pasó lo de Zaira dije que eso (la falta de atención médica), podía pasarle a mi hija. Pero le pasó a mi hijo. Hace exactamente un año se murió Zaira. Y hoy es mi hijo quien murió abandonado por un médico porque no había quien lo asista”, afirmó Diana, quien ayer debió ser internada.