Al calor, helado

Se acerca el verano en Argentina, con sus días calurosos y las ganas de refrescarse. Ahí es donde el helado pisa fuerte, como principal soldado para combatir las altas temperaturas. Una pasión local que tiene anclas bien hundidas en la inmigración italiana de hace más un siglo, pero que además desarrolló un espíritu propio en estas tierras. Un buen ejemplo es Sui Gelé, heladería familiar que viene elaborando helados artesanales desde hace once años, con recetas clásicas e ingredientes de calidad. Aquí no se utilizan premezclas industriales, pastas, colorantes o saborizantes. Todo arranca desde cero, e incluso hacen sus propios cereales bañados en chocolate que dicen presente en el clásico Tramontana; y compran los pistachos de San Juan para elaborar este gusto tan de moda en los últimos años.

Alberto Jankilevich trabaja en la industria heladera desde hace muchos años; según cuenta, supo ser dueño de la primera fábrica de máquinas de elaboración y pasteurización de helados en el país. Un día decidió vender la fábrica y abrir su propia heladería en Parque Leloir, que se convirtió en un éxito de la Zona Oeste. En noviembre de 2021 su hija Lulú, fotógrafa y directora de arte, decidió cruzar la General Paz y abrir una sucursal en Palermo.

Con elaboración diaria y a la vista del público, destacan los sabores ya conocidos como el sambayón o el Banana Split. También se venden bien algunos más originales como el chocolate azteca (vegano) o el de naranja sanguínea, refrescante y atípico. Hay helados dedicados a miembros de la familia fundadora, como el chocolate blanco Fidel, con dulce de leche y ron; el chocolate don Alberto, con whisky y cookies; o el dulce de leche Malena, con nueces acarameladas. Los precios van de $1800 el vaso pequeño, $2000 el cucurucho grande, $2500 el cuarto y $7000 el kilo. Suman café (desde $900), batidos ($2400) y un affogato ($1300) que se está convirtiendo en un best seller de la casa. 

No hay dudas: altas temperaturas y helado artesanal, un solo corazón.

Sui Gelé queda en Gorriti 5023 (Palermo) y en Av. Pte Perón 8655 (Parque Leloir). Horario de atención: lunes a viernes de 14 al cierre; sábados y domingos desde las 12. Instagram: @sui_gele.

La delicadeza francesa

Un homenaje a la “pate a choux”, o “pasta choux”, más conocida por estos lares como masa bomba. De eso se trata Choux, especialistas en los éclairs. El lugar es creación de Florencia y Daro, pastelera y chef respectivamente, que se conocieron trabajando en el Hotel Alvear y que, después de varios años de experiencia y un viaje inspirador a Paris, decidieron abrir sus propio local. “Recuerdo entrar a L'Eclair de Génie, el local parisino de Christophe Adam, uno de los chefs más reconocidos de Francia, y quedar flasheada ante tanta belleza y originalidad. Si bien en Francia un éclair es un producto tan común como acá podría serlo un alfajor, él lo llevó a otro nivel, con un local exclusivo y tratando a cada producto como una joya” cuenta Florencia.

La boutique ubicada en Palermo se dedica entonces a estos éclairs, sumando además algunas opciones que aprovechan esa misma masa bomba para su elaboración, incluyendo profiteroles o la Paris Brest, suerte de tarta o rosca deliciosa. Los ingredientes son de calidad, incluyendo chocolate belga, pulpas de frutas naturales y materias primas elegidas una a una.

El menú ofrece sabores estables todo el año, y otros especiales que cambian mes a mes, además de productos para fechas especiales como Navidad o Año Nuevo. Una opción puede ser el Lemon Please ($2300) con merengue y curd de limón; también el Caramel Crunch ($2500) con caramelo, avellanas y baño de chocolate. Un infaltable con estilo argentino es el Choco Torta ($2100) y sus ingredientes clásicos. El especial de diciembre es el almendrado ($2500) con cremoso de almendras y praliné. Además tienen combos especiales como el Premium Box ($22000) con 10 unidades de éclairs; también el You & me Box con seis opciones a $13800 o el My Box de cuatro variedades ($9200). Cada pieza es pensada individualmente como una mini torta, la mayoría tiene más de un relleno, un baño y una decoración que no sólo decora, sino que aporta sabor y textura. 

Suena ajeno a la cultura local, pero estos éclairs tienen fuertes argumentos para enamorar.

Choux queda en Juncal 4680. Horario de atención: miércoles de 12 a 19; jueves a domingo de 10:30 a 19. Instagram: @choux.eclairs.

El macaron helado

Laban es una panadería y pastelería de inspiración francesa en el barrio de Las Cañitas que destaca por sus laminados 100% de manteca, la utilización de materia prima de primera calidad y la originalidad de sus productos finales. Pero a todo eso tiene que sumar un ítem en su currículum: son los inventores del macaron helado, uno de los hits dulces de Buenos Aires.

Comandada por Jacquie Albajari, pastelera y dueña, Laban abrió en 2013 con una idea de vender todo tipo de comidas. Recién en 2020 el lugar dio un enorme salto de crecimiento y especialización: hicieron un cambio de imagen, reformaron el local y lo convirtieron en una panadería y pastelería de aires franceses, con varias especialidades. Fue ese mismo año que nació su famoso macaron helado ($3000), con gustos como pistacho, vainilla, caramelo salado o mascarpone y frambuesa (además de un sabor un especial cada mes; el de diciembre es de tramontana). Para compartir hay una versión XXL, una torta de macaron helado ($22000) ideal para un cumpleaños veraniego (se encarga con 72 horas de antelación). 

Más allá de esto, en Laban hay muchas otras cosas, todas deliciosas. El palmerón gigante ($2000) reversiona la conocida palmerita al tamaño de una cabeza, manteniendo ese crujiente perfecto. También su pan dulce ya es un viejo conocido, que no solo se hace en Navidad sino todo el año, aunque ahora es cuando su demanda se multiplica. Hay opción de 450 gramos a $6000 y otra de 850 gramos a $11000). Además un mil hojas que sale por porción ($3000) y varios de los emblemas franceses como la croissant, el pain au chocolat ($1200), el canelé ($1200) y el macaron clásico ($1100). Como seña de identidad argentina hay medialunas de manteca ($600), de tamaño y estilo tradicional, con una calidad que las posiciona entre las más ricas de la ciudad.

Hoy Laban anda con novedades a futuro: en poco tiempo se mudan a Palermo (anunciarán la dirección redes sociales). Mientras tanto, esta es una buena oportunidad para despedirse de su local de Cañitas.

Laban queda en Migueletes 688. Horario de atención: martes a sábados de 10 a 18; domingos de 10 a 17. Instagram: @labanpatisserie.