Con sus ochenta y cinco años cumplidos, tras dos temporadas de ausencia, vuelve al país el principal difusor del chamamé a nivel mundial: Raúl Barboza. Su presencia en París desde hace más de 30 años, fue generando la adhesión y admiración de colegas extranjeros, para luego conquistar al público parisino e internacional con esta música representativa del litoral argentino. Una vez más honrará a la ciudad con su presencia, con la humildad de los grandes y con el acompañamiento de su acordeón “El Morocho”. (Hoy, a las 21, en Sala Lavardén)