En el Ministerio de Trabajo de la provincia de Buenos Aires el 80 por ciento de los cargos jerárquicos del gabinete inicial conformado por la gobernadora María Eugenia Vidal está ocupado por representantes del sector privado. Los individuos convocados son ex directivos de las áreas de recursos humanos o relaciones laborales de las compañías. La mitad de los funcionarios bonaerenses con cargos relevantes en la Secretaría de Medios, la Secretaría General y el Ministerio de Producción, Ciencia y Tecnología ocupaban cargos en empresas antes de desembarcar en la gobernación. Los datos corresponden a la última investigación del Observatorio de las Elites Argentinas perteneciente al Instituto del Altos Estudios Sociales de la Universidad Nacional de San Martín.
La primera publicación de ese equipo de investigación identificó que tres de cada diez funcionarios jerárquicos reclutados por el Gobierno de Mauricio Macri ocuparon alguna vez un puesto gerencial en el sector privado. En el gabinete de Vidal el perfil empresarial es significativamente menos relevante: en la provincia de Buenos Aires sólo el 12 por ciento responde a la categoría de CEO, y se agrupó especialmente en el Ministerio de Trabajo.
“No sólo con CEOs gobierna Cambiemos sino que también ocupa y controla territorios complejos y críticos, como la provincia de Buenos Aires, con cuadros políticos y de gestión de larga trayectoria en el Estado, que le otorgan a la alianza social en el poder una expertise y una versatilidad nada despreciables”, explican las sociólogas Paula Canelo y María Cecilia Lascurain que estuvieron al frente del relevamiento. Contra el discurso anti-estatal del PRO, las investigadoras identificaron que el 75 por ciento de los individuos sobre los que hay datos sobre cargo previo ocupaba algún tipo de cargo público al momento de ser convocado por Vidal a integrar el gabinete. “Si consideramos al conjunto de altos funcionarios que venían directamente de ocupar un cargo público (62 individuos), casi el 70 por ciento lo hacía en la Ciudad de Buenos Aires, cuna del PRO y de la propia Vidal, y verdadero ‘semillero’ de su gestión en la provincia. La provincia de Buenos Aires es gobernada, así, por un ‘gabinete porteño’”, indica el documento.
Otro elemento que señala el trabajo es el rol de las mujeres en el gabinete bonaerense: “Son una minoría en el equipo de la gobernadora Vidal, se encuentran segregadas de la mitad del gabinete y además ocupan las jerarquías más bajas”, sostienen Canelo y Lascurain. El perfil “femenino” que busca construir públicamente la gobernadora contrasta con el hecho de que haya seleccionado sólo a un 16,5 por ciento de mujeres para acompañarla en la gestión. La bajísima proporción es inferior a la observada a nivel nacional donde la primera investigación del Observatorio de las Elites Argentinas mostró que las mujeres accedían a menos del 25 por ciento de los puestos del gabinete inicial de Macri.
“Si excluimos la cuestión del género, Vidal designó a un elenco de colaboradores que, por su edad promedio, su tipo y ámbito de formación educativa, y su participación en ONG y fundaciones, parece diseñado a su imagen y semejanza”, expresa el documento donde se analizan las trayectorias sociolaborales y educativas de 91 funcionarios jerárquicos del gabinete inicial provincial. Un elemento adicional que destacan desde el Observatorio es que el 35 por ciento de los colaboradores de Vidal posee, al igual que la gobernadora, participación en ONG y fundaciones, confirmando una característica propia del PRO como fuerza política.
La exhaustiva radiografía coordinada por Canelo y Lascurain junto con un equipo de colaboradores de la Unsam identifica además que los principales funcionarios bonaerenses conforman un “gabinete multipartidario”. Mientras que los slogans de campaña muestran a la gestión provincial como una “nueva generación apolítica y apartidaria, la estructura jerárquica de la provincia se presenta atravesada por una red de pertenencias a partidos de larga presencia en el escenario político argentino”, sostienen las investigadoras al enfatizar el 18 por ciento de sus miembros participaron en alguna variante del peronismo (FPV, PJ, Unión Celeste y Blanco).