Si bien no alcanzó los niveles de Bahía Blanca, la tormenta también arrasó en el sur del conurbano bonaerense. Desde el domingo, la primera instancia de asistencia municipal estuvo ligada a aquellos casos que involucraban riesgo de vida. Luego, los trabajadores municipales relevaron los daños estructurales de cada lugar, y continuaron más tarde con la labor particular de cada área de gobierno. Según pudo saber este diario, el gobierno de la provincia de Buenos Aires y sus ministerios mantuvieron contacto y asistieron a todos los municipios afectados por el temporal.

En Lanús, la municipalidad a cargo de Julián Álvarez desplegó una patrulla de 60 cuadrillas y más de mil personas que se encargaron de recorrer la ciudad cuadra por cuadra. Fueron 600 los agentes municipales y 400 los voluntarios divididos en 20 cuadrillas designados al esquema de emergencia, que contó además con 12 dotaciones de bomberos, cinco cuadrillas de Defensa Civil y 23 equipos de tarea de Espacios y Servicios Públicos. 

El intendente de Unión por la Patria usó a sus redes sociales para informar que, luego del desastre climatológico, las instalaciones del Club Atlético Lanús ofician como espacio de evacuación para aquellos que sufrieron daños de magnitud en sus viviendas. 

La municipalidad de Almirante Brown realizó, hasta el momento, 450 intervenciones en la vía pública, como respuesta a los innumerables daños causados por la naturaleza. El gobierno local, a cargo de Mariano Cascallares, contó con la participación de más de 270 personas pertenecientes a las delegaciones municipales, el Servicio de Emergencias, el cuerpo de Luminarias, y las secretarías de Infraestructura y Gestión Descentralizada. Si bien desde el gobierno municipal indicaron que los trabajos abarcaron las doce localidades que componen Almirante Brown, la mayoría de los trabajos se dieron en Glew, Longchamps, Claypole y Ministro Rivadavia.

En Almirante Brown, además, el lunes hubo más de 3 mil habitantes sin luz. El gobierno local explicó que es él quien coordina y monitorea los operativos realizados por los equipos de Edesur. Aseguraron que, desde un primer momento, le comunicaron a la empresa la información total de los problemas en la vía pública y las interrupciones en el suministro domiciliario.

En el municipio de Quilmes, donde hubo 20 evacuados, la municipalidad a cargo de Mayra Mendoza brindó asistencia integral en la ribera de Bernal ya que se trató de una de las zonas más afectadas por el temporal. Desde el fin de semana, equipos locales de servicios públicos, defensa civil, el centro de emergencias, Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos y Desarrollo Social, articularon su labor junto a la Dirección de Mantenimiento de la provincia de Buenos Aires. 

A ellos le sumaron el esfuerzo y la colaboración cooperativa, ya que las asociaciones Fuerza al Alma, Nuevo Horizonte y Las Gaviotas brindaron un total de 98 trabajadores cooperativos. Éstos contaron con camiones de servicios públicos, volcadores, retropala y minipala, y cuadrillas de alumbrado público de la provincia de Buenos Aires, que limpiaron las calles y las liberaron de los árboles y las ramas caídas. 

Además de ordenar el posteado y cableado en mal estado, que acompleja la situación del suministro eléctrico, la municipalidad de Quilmes indicó que el área de Desarrollo Social, llevó adelante un operativo compuesto por 20 trabajadoras que relevaron los hogares afectados, donde entregaron kits de limpieza, comida y ropa interior.

Avellaneda, municipio comandado por Jorge Ferraresi, fue otro de los territorios dañados por el temporal, aunque su principal problemática estuvo ligada a la energía eléctrica. Según el reporte que el Ente Nacional Regulador de Energía actualizó este lunes, casi 13 mil vecinos y vecinas de Avellaneda se encuentran sin suministro eléctrico. El inconveniente se debe a que 16 alimentadores quedaron fuera de servicio como resultados del agua y las ráfagas de viento. Además, las áreas de defensa civil, obras públicas, los bomberos, la policía y todas las áreas del gobierno local sumaron sus esfuerzos a la solidaridad de los vecinos, que trabajaron en la liberación de las arterias más importantes de la ciudad, ya que levantaron ramas y árboles caídos, arreglaron tendidos de cables, repararon semáforos y despejaron las principales avenidas del municipio.

En sus redes sociales, el alcalde de Avellaneda indicó que el Parque Domínico, el complejo Domínico Alto Rendimiento (DAR) y el Polideportivo Gatica, fueron seriamente afectados por el temporal. Ferraresi señaló que ya trabajan para reparar los daños en toda la zona, porque "sabemos del valor de esa infraestructura y ese espacio publico para nuestra ciudad". Dijo que garantizará "su recuperación y la de cada predio perjudicado por la tormenta".

Berazategui fue otro de los municipios del sur del conurbano bonaerense cuyo principal problema se centró en la falta de luz. La caída de los árboles y los postes de luz causaron fallas en las redes de energía eléctrica de las empresas EDESUR Y EDEA que limitaron, además, el normal funcionamiento de los pozos de agua potable del distrito. Si bien el municipio conducido por José Mussi no lamentó grandes pérdidas, centró sus energías en la precaución, ya que para la tarde del lunes, esperaban la continuidad de los intensos vientos y la caída de una gran cantidad de agua. Por este motivo, le recomendaron a los vecinos no permanecer la intemperie, circular por lugares seguros, no pasar debajo de los árboles, y no tocar alambrados ni cables caídos en la vía pública.

Florencio Varela también se vio afectado por la falta de energía. Incluso, el municipio comandado por Andrés Watson le pidió a las prestatarias EDESUR y AYSA "mayor celeridad en la reanudación del servicio", ya que la ruptura de postes dejó sin suministro eléctrico a más de 30 mil usuarios, por lo que el gobierno varelense señaló que intimó a Edesur "para que restablezca el servicio de forma urgente". La municipalidad indicó que todo el entramado de gobierno realiza tareas de asistencia a vecinos y vecinas, sobre todo en los puntos que presentaban mayores inconvenientes, ya que a la caída de árboles se le sumó un gran cantidad de voladuras de techo.

Mediante múltiples dispositivos, el municipio varelense realizó trabajos de limpieza en los barrios, recolección de ramas y desechos, limpieza y liberación de sumideros, y saneamiento hidráulico. Destacaron, además, que continuar "hasta superar la situación" en coordinación con las cuadrillas municipales, la guardia comunal y defensa civil.

En Esteban Echeverría, la municipalidad conducida por Fernando Gray lamentó los daños en la Escuela Primaria N° 51, en El Jagüel, y el Club Social y Deportivo Estrella del Sur, en Luis Guillón. Además de realizar las tareas de control de daños, los equipos conformados por el personal de las diversas áreas de gobierno todavía trabaja en las zonas afectadas por la tormenta, que causó sus mayores afecciones en las localidades de Monte Grande, Monte Grande Sur, Luis Guillón, 9 de Abril, El Jagüel y Canning. Allí se mantienen la limpieza de sumideros, la recolección de ramas y residuos, y la desobstrucción de avenidas, calles y plazas.

En el municipio de Lomas de Zamora se cayeron 200 arboles, 100 postes de luz y se volaron 100 techos y no hubo evacuados. Federico Otermín, intendente lomense, encabezó el Comité Operativo de Emergencias del Municipio que monitoreó el impacto del temporal y articuló la asistencia a los vecinos del distrito que se vieron afectados por las lluvias. Otermín dijo que "fue muy impactante" el daño que causó el temporal, y que se llevará adelante "la total reconstrucción del espacio público" por parte de todo el equipo del municipio lomense.

Gastón Granados, intendente de Ezeiza, se mostró desde el inicio del temporal junto a los vecinos del distrito. A primera hora del domingo, los equipos del municipio recorrieron los barrios de Ezeiza y realizaron los arreglos correspondientes. Según indicaron, la caída de árboles se dio en gran número, así como el de ramas, postes y techos. La municipalidad realizó una gran cantidad de zanjas, en busca de que el agua acumulada no continúe anegando el paso de los vecinos.

En Bahía Blanca intensificaron la asistencia

Los autoridades, municipales y provinciales, mantuvieron el despliegue de sus operativos en los municipios bonaerenses afectados por la catástrofe climática del domingo. En Bahía Blanca, la localidad más dañada que sufrió la muerte de 13 habitantes, el gobierno de la provincia de Buenos Aires intensificó las tareas este lunes y dispuso la presencia de más de 800 efectivos abocados a solucionar los inconvenientes de los damnificados. 

En lo que a seguridad respecta, el Estado bonaerense brindó más de 300 efectivos de las áreas de seguridad siniestral, emergencias, defensa civil y logística. También puso a disposición 35 camionetas, seis móviles logísticos, tres autobombas, dos minibuses, dos camiones de talleres, una grúa palanca y un hidroelevador, además de carpas, catres, motosierras, generadores eléctricos y torres de iluminación. El flamante ministro de seguridad provincial, Javier Alonso, se encuentra en Bahía Blanca desde el domingo y es quien coordina la labor junto al equipo de trabajo de Federico Susbielles, el intendente local. 

Desde la Dirección de Vialidad, que pertenece al ministerio de Infraestructura, aportaron nueve camiones volcadores, tres palas cargadoras y minicargadoras, un generador y personal de apoyo.

En cuanto a cuidados y atención, el ministerio de Salud a cargo de Nicolás Kreplak reforzó el sistema sanitario con cinco ambulancias de alta y media complejidad, sumado a una camioneta 4x4. También instaló una "unidad de logística y desastre", compuesta por tres carpas que ofician de puestos médicos avanzados, cuyo equipamiento es secundado por varios grupos electrógenos. Y dispuso la intervención de cinco psicólogos en la Red Provincial de Salud Mental en Incidente Crítico (PROSAMIC).

Alimentos, bidones de agua, y elementos como 2.000 chapas tirantes y clavaderas, 1.500 kits de limpieza, 500 de indumentaria, calzados, 1.400 frazadas y 450 colchones fueron el aporte del Ministerio de Desarrollo de la Comunidad a cargo de Andrés Larroque.