Pablo Javkin estrenó su mayoría compuesta en el Concejo y comprobó que funciona a pedir de boca. En una sesión de noche y trasnoche, consiguió todas las herramientas que le pidió al parlamento local: el Presupuesto aprobado para 2024; pero además la potestad renovada por dos años más para aumentar el boleto de colectivos sin consultar al Concejo, cada dos meses y al ritmo de la mega inflación que ya se dispara. También el interbloque oficialista consiguió atar el aumento de la Tasa General de Inmuebles al Índice de Precios al Consumidor (IPC), y aprobó la polémica tasa vial que de ahora en más encarece 1,6% el litro de combustible en Rosario.

El Presupuesto mereció la aprobación unánime, en tanto herramienta clave de todo gobierno. Contempla un equilibrio con leve superávit: recursos por $381.035 millones de pesos y gastos por $380.854,5 millones, aunque con cifras de contexto quizás inciertas en el escenario inflacionario, lo que llevó a Fernanda Gigliani (Iniciativa Popular) a tildarlo de "una ficción".

La presidenta del Concejo, María Eugenia Schmuck, prefirió destacar que pese a todo la norma contempla obras públicas y de seguridad con recursos propios del municipio. Y resaltó que la deuda pública municipal se redujo: 17% del presupuesto abarcaba en 2019, y 3,8% representa en las previsiones para 2024. 

La edila, principal ariete oficialista en el Concejo, también defendió los cambios realizados a la Ordenanza General Impositiva (OGI), como la eliminación de 30 tasas a cambio de crear la controvertida tasa vial. 

"En realidad, eliminamos 30 de las 80 tasas municipales que se venían cobrando y generamos una simplificación de trámites en beneficio de los usuarios. En un escenario de contracción de los fondos nacionales destinados a la obra pública y alta inflación, el aporte que realicen quienes llenen el tanque de su vehículo se destinará a la mejora de las condiciones de circulación", ponderó Schmuck. "Serán los mismos automovilistas quienes se beneficien con este aporte", alegó.

En lo particular, hubo posiciones de rechazo a los artículos por los que finalmente se creó ese gravamen sobre las naftas y se cambió el criterio de actualización de la TGI y el boleto de transporte. La TGI podrá aumentar en base al IPC, mes a mes. Lo mismo con el boleto, por otros dos años Javkin podrá incrementar su precio de manera bimestral en los meses impares, según el Estudio de Costos pero también con el IPC como referencia.

Votaron en contra los bloques Ciudad Futura, Justicialista, Iniciativa Popular y Vida y Libertad.

Intendente Pablo Javkin y concejala María Eugenia Schmuck.

 

La oposición

La peronista Norma López fustigó: "El intendente inaugura su segundo mandato haciendo lo mismo de siempre. Se queda con la potestad de aumentar el boleto sin control del Concejo, y aumenta la cantidad a 6 veces en el año. Y además aplica otro índice, el IPC, que en esta economía inflacionaria, con las políticas de ajuste que lleva adelante (el presidente Javier) Milei es un combo fatal. La economía familiar quedará mucho más erosionada por este tarifazo", dijo.

"Estos aumentos no son para sostener el municipio de manera estable, son para acompañar el ajuste de Milei en nuestro país", cerró.

El tono opositor a la tasa vial pasó por la carencia de progresividad, tal como ha sido concebida. "Siempre que discutimos tasas defendemos eso, y acá se le cobra a todos por igual: al pibe que labura en Rappi con su motito y a aquel que llega en una Hilux o que viene a comprar nafta para pasear en su embarcación el fin de semana", marcó Gigliani. Y comentó la posición de desventaja en la que quedan las estaciones de servicio rosarinas con un combustible más caro que en localidades aledañas.

"Esto le daría al municipio unos 39 millones de pesos al año, según el gremio de estaciones. Por año con eso el Ejecutivo recauda menos de un 4% de lo que gastará en publicidad. Hubiese sido más pertinente reducir el gasto en propaganda", apretó la edila de IP. 

Juan Monteverde expuso su contrariedad ante la batería de herramientas que el oficialismo le aseguró al Ejecutivo, pero también se lo reprochó al resto de la oposición. Es que el interbloque Unidos (15 ediles de Arriba Rosario, Socialista, PRO, Volver a Rosario, Radical y Juntos por el Cambio) necesitaba mayoría especial para habilitar el tratamiento de la delegación de facultades al intendente para aumentar el boleto. Es decir, 21 votos, y los consiguió del resto de los bloques opositores, menos los 4 ediles de Ciudad Futura.

"El intendente decidió trasladarle todos los costos a la gente, no tuvo mejor idea que atar todo a la inflación. Lavarse las manos", pegó el concejal. 

El concejal de Ciudad Futura Juan Monteverde.

"Lo que me sorprende –añadió– es que gran parte de la oposición acompañe esto y habilite este atropello. Hoy estamos votando la posibilidad de que el boleto aumente automáticamente por el IPC porque parte de la oposición acompañó. Si no, no salía. Ahí hay una profunda derrota política y cultural que une al oficialismo con la oposición: decir que 'no queda otra'. Y cada vez que un gobernante dice eso está mintiendo. Porque el trabajo de un gobernante es encontrar esas alternativas. Es una gran irresponsabilidad aprobar esto cuando ninguno de los que estamos acá tenemos idea de la inflación que vendrá. Perdimos la posibilidad de que el intendente tenga que sentarse a discutir quién pagará la diferencia. Han hecho que sea la gente quien la pague", reprendió Monteverde. 

De yapa

Lo presupuestario y tributario no fue lo único que el parlamento local le concedió al Ejecutivo municipal. También le dio luz verde al incremento de la tarifa de taxis a partir del 10 de enero. La bajada de bandera de la tarifa diurna se fija en $918 y $43 la ficha y el minuto de espera; la tarifa nocturna en $1.073 la bajada de bandera y $49 la ficha y el minuto de espera; domingos y feriados, $1.176 pesos la bajada de bandera y $49 la ficha y el minuto de espera y nocturna viernes, sábados y vísperas de feriados, 1.176 pesos y 49 pesos la ficha y el minuto de espera.

También el oficialismo aprobó iniciativas de desarrollos inmobiliarios privados que envió la Intendencia al Concejo. En todas hubo que autorizar excepciones al Código Urbano por exceder la normativa de cada emplazamiento. Se trata de un complejo de torres en el predio de Cinépolis (ex Village, de Eva Perón al 5400), otro en Corrientes y San Lorenzo (Riviera Palace), otro más en avenida Carballo y Estrada (Pilay), y una readecuación de uso urbano sobre calle La República (Paseo de los Constituyentes).