"Históricamente la derecha gobierna por decreto y sin el Parlamento. Hablan de democracia, pero actúan de espaldas al Congreso conformado por los representantes del pueblo", sentenció el ex presidente de Bolivia Evo Morales al advertir el peligro que significa para la democracia argentina el DNU firmado por el presidente Javier Milei, en el que incorpora más de 300 modificaciones a casi cien leyes, pasando por encima de los atribuciones del Poder Legislativo. Y puso en duda que el gobierno de ultraderecha termina su mandato.
"Sin legislación ni fiscalización, se generaliza el abuso de poder y la corrupción", completó su mensaje Morales, quien también habló sobre sus percepeciones de la situación política y económica que vive Argentina en una radio local, tras visitar el país a principios de diciembre.
El expresidente Morales calificó de "muy grave" la crisis que vive Argentina y comentó, en diálogo con la radio Kawsachun Coca, los diálogos que mantuvo con dirigentes sindicales y sociales en su reciente vicente el 1 y 2 de diciembre, en los días previos a la asunción de Javier Milei como presidente, sobre la mayor preocupación de la sociedad: el incremento de los precios.
El dirigente --que en 2019 sufrió un golpe de Estado-- contó que al regresar a su país, tras su última visita en la Argentina, pensó: "Me despido por cuatro años". Pero que al ver los primeros días de gobierno de Milei, la idea mutó: "A lo mejor no van a ser cuatro años ahora, eso se siente, qué pasará porque hay una reacción total".
Morales fue electo como presidente de la dirección nacional de Movimiento Al Socialismo (MAS) en octubre pasado, en medio de una feroz lucha interna con el actual presidente y ex ministro de economía Luis Arce. Las elecciones en Bolivia serán en 2025, pero la interna del MAS vuelva a abrir las posibilidades de la derecha para retornar al poder, que desde la primera presidencia de Evo en 2006, solo han alcanzado a través del golpe de 2019.
"Ojalá no pase eso en Bolivia", sostuvo Morales respecto de lo que está sucediendo en Argentina con el ascenso de Milei al Poder Ejecutivo nacional, pero no dejó de enviar críticas a Arce, a quien denunció por hechar funcionarios "evistas". "Allí (en Argentina), peronistas fuera, aquí evistas fuera. Qué coincidencia", comparó Morales por los despidos que promete Milei y los que están ocurriendo en Bolivia.
Morales fue aliado del fallecido Néstor Kirchner y de Cristina Fernández de Kirchner, mientras que Arce reeditó esa alianza con Alberto Fernández desde que llegó a la Presidencia de Bolivia a fines de 2020. El Gobierno de Arce ha manifestado que espera mantener "el mismo nivel de cooperación fructífera" que ha tenido hasta el momento con Argentina, aunque el presidente boliviano no asistió a la investidura de Milei.
La semana pasada, Arce sostuvo que "hay que parar las orejas" ante los posibles efectos que tengan las medidas del Gobierno de Milei en los países vecinos de Argentina y aseguró que su administración tomará todas las medidas necesarias para "defender" la economía boliviana.
En esa línea, el ministro de Economía de Bolivia, Marcelo Montenegro, informó el miércoles que el Gobierno "está evaluando los impactos de las medidas" económicas que se están aplicando en Argentina y que "oportunamente" se anunciarán las acciones para proteger sobre todo la "seguridad alimentaria" y la producción de alimentos en el país.