Lucasfilm, la productora detrás de la icónica saga Star Wars, denunció a un lavadero de autos chileno llamado "Star Wash", por infringir la marca registrada de la compañía de entretenimiento que desde 2012 es propiedad de Disney.
"En una galaxia plagada de conflictos, emerge una batalla legal de proporciones épicas. En el epicentro de esta guerra, “Star Wash”, un modesto negocio familiar, se encuentra atrapado en un enfrentamiento con el imponente Imperio Lucasfilm", postearon desde el lavadero -ubicado en las afueras de Santiago de Chile- en sus redes sociales con un video.
"La demanda desata la confrontación, alegando que el nombre “Star Wash” atenta contra los dominios de la legendaria marca “Star Wars”, desencadenando la inquietud de que pueda sembrar la confusión y aprovechar indebidamente la renombrada fama galáctica. Nos mantendremos fuertes. La fuerza nos acompaña", agregaron.
La productora demandó al lavadero ante el Instituto Nacional de Propiedad Industrial (INAPI), dado que su nombre y estética -similares al de la saga creada por George Lucas- podría prestarse para confusiones, dado que el comercio no se limita solo al lavado de autos, sino que también ofrece otros productos y servicios temáticos relacionados con Star Wars, como juguetes y bebidas no alcohólicas.
“Nadie puede confundir nuestro negocio con alguna franquicia de la productora”, sostuvo Matías Jara, propietario del lavadero, quien se mostró sorprendido por la denuncia. Reconoció que la preocupación de la empresa es legítima, pero confió en que se pueda mantener el nombre y "preservar la esencia única de ‘Star Wash’ mientras respetamos, y de cierta manera honramos, el legado de ‘Star Wars“.
En este sentido, sus abogados argumentaron que "hay una diferencia clara en los nombres" y sostuvieron que "los derechos de autor de Lucasfilm no se extienden al negocio de lavado de autos".
El lavadero "Star Wash", que tiene 26 mil seguidores en Instagram donde comparten videos, ganó notoriedad en la región por su temática completa sobre Star Wars, que incluye desde decoraciones inspiradas en la saga hasta empleados vestidos como personajes icónicos. Así, el negocio atrae a fanáticos y a clientes curiosos por igual.
Ahora resta conocer cuál será la resolución judicial, que podría tener implicaciones importantes para los negocios temáticos en todo el mundo y arrojar luz sobre los límites de la protección de la marca en industrias no convencionales como el lavado de autos.