El balance de palestinos muertos a causa de la ofensiva israelí contra la Franja de Gaza subió a más de 21.300, según informaron este jueves las autoridades gazatíes. En tanto, Unicef denunció que al menos 124 niños palestinos y seis israelíes fueron asesinados en lo que va del año en Cisjordania y Jerusalén. Esta cifra sin precedentes convierte a 2023 en el año más mortífero para la infancia en estas regiones, donde la violencia recrudeció debido al estallido de la guerra entre Israel y el grupo islamista.
Siete civiles palestinos, en su mayoría niños y mujeres, murieron en un bombardeo israelí dirigido al campamento de refugiados de Nuseirat, en el centro de la Franja de Gaza, según fuentes locales. Hasta el momento no se determinó el número de heridos. Los aviones de Israel también lanzaron varias incursiones en el centro de la ciudad de Jan Yunis y en tierras de cultivo al norte de la ciudad de Rafah, al sur de la Franja, según informó la agencia palestina WAFA.
Según el último balance de la cartera de sanidad gazatí, la cifra total de muertos subió a 21.320 --entre ellos alrededor de 9.000 niños-- y a 55.603 los heridos, en el marco de la campaña de bombardeos de Israel contra la Franja, en represalia por el ataque terrorista de Hamas el pasado 7 de octubre que mató a alrededor de 1.200 personas y tomó 240 rehenes, entre ellos una veintena de argentinos.
La situación en Cisjordania
Mientras tanto, el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) afirmó que este año fue el más letal para la infancia en Cisjordania y Jerusalén, con 124 palestinos muertos y seis israelíes. "En las últimas 12 semanas, 83 niños y niñas fueron asesinados, más del doble de todos los niños y niñas asesinados en todo 2022, en medio de un aumento de las operaciones militares y de las fuerzas policiales de Israel", indicó en un comunicado la directora regional de UNICEF para Medio Oriente y el Norte de África, Adele Khodr.
Más de 576 menores resultaron heridos y se informó de la detención de algunos otros, precisó Khodr, antes de agregar que Cisjordania se vió duramente afectada por restricciones de acceso y movimiento, tras el estallido del conflicto bélico entre Israel y Hamas hace casi tres meses.
"Mientras el mundo mira con horror la situación en la Franja de Gaza, los niños y niñas de Cisjordania están viviendo su propia pesadilla. Vivir con un sentimiento casi constante de miedo y dolor es, tristemente, demasiado común para los niños afectados", señaló la directora. "Muchos cuentan que el miedo se convirtió en parte de su vida diaria, y que tienen miedo incluso de caminar hacia la escuela o de jugar al aire libre, debido a la amenaza de disparos y otro tipo de violencia relacionada con el conflicto", lamentó, dando cuenta de la preocupación de Unicef por la situación en torno del derecho de los niños a la seguridad y la protección.
El reporte dedicado solo a la infancia coincide con otro documento hecho público también este jueves por el Alto Comisionado de Derechos Humanos de Naciones Unidas, Volker Turk, que alertó del rápido deterioro de la situación de los DDHH en Cisjordania y Jerusalén tras comenzar la guerra.
Concretamente, desde octubre en Cisjordania hubo al menos 300 muertos --291 a manos de las Fuerzas de Seguridad Israelíes y el resto asesinados por civiles israelíes--, además de un aumento de detenciones ilegales y maltrato de detenidos. En ese sentido, el organismo pidió a Israel el fin inmediato del uso de armas y medios militares durante operaciones de seguridad, el cese de las detenciones arbitrarias de palestinos y la retirada de las restricciones de movimiento discriminatorias.