El periodista, sociólogo y colaborador de Página|12 Marco Teruggi analizó las posibles consecuencias del portazo de Argentina a los BRICS y el nuevo posicionamiento del Gobierno nacional en materia de política internacional.
"Javier Milei ha sido muy claro: la posición es de alineamiento con Estados Unidos e Israel. Creo que es una política exterior sobreideologizada porque, la verdad, tiene más marcas de un posicionamiento ideológico que de una estrategia ante un mundo tan complejo", consideró Teruggi, en diálogo con AM750.
A través de una carta, la Cancillería argentina comunicó a los países integrantes del bloque económico integrado por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica que Argentina no ingresará al acuerdo comercial a partir del 1 de enero de 2024.
La decisión de Milei ya había sido notificada por la canciller Diana Mondino el pasado 1 de diciembre, tras ganar la segunda vuelta. Las razones que expuso el Gobierno fueron puramente ideológicas. "La impronta en materia de política exterior del gobierno que presido desde hace pocos días difiere en muchos aspectos de la del gobierno precedente”, anunciaba el texto.
Para Teruggi, es inevitable que la salida del bloque económico se perciba con malos ojos por todos los países integrantes. Especialmente, en el caso de Brasil, ya que el presidente Luiz Inácio da Silva fue el principal vector para el ingreso de Argentina.
En esa línea, recordó que este gesto se suma a otros que podrían complicar el vínculo de Argentina con Brasil, como la invitación de Milei a Jair Bolsonaro a la asunción presidencial. "Uno no puede más que preocuparse. Se ve que es una política exterior que dificilmente traiga beneficios", reflexionó el periodista en Aquí, allá y en todas partes.
Hoy, sostuvo, es casi inconcebible la ruptura diplomática con algunos jugadores del mapa mundial. "La alineación plena de la política externa con Estados Unidos en un contexto de multipolaridad no pareciera ser estratégico", insistió Teruggi.
En este punto, es válido preguntarse qué ofrece Estados Unidos. "Parte de la disputa es que China tiene una cartera de posibilidades de inversión y con menores demandas que las de Washington", agregó Teruggi, y se preguntó cuáles son las alternativas al financiamiento que ofrece Beijing.
Sobre este punto, el sociólogo señaló otro episodio, como la visita del diputado de La Libertad Avanza Agustín Romo a la embajada de Taiwán y la posterior imagen con las cajas navideñas de regalo. El conflicto entre este último país y China (que considera a Taiwán parte de su territorio) está en un punto álgido y Beijing ya había advertido al Gobierno argentino al respecto. "Es una suerte de amateurismo o de provocación innecesaria", planteó Teruggi.
Por último, dijo que seguramente esté en funcionamiento una política de "control de daños", pero advirtió que pueden no generar el efecto deseado: "Enfrente hay actores serios, con diplomacias serias y cancillerías muy experimentadas que piden un mínimo acto de respeto diplomático que este Gobierno no ha sabido dar y, en ocasiones, no ha querido", concluyó.