"Quisiéramos que nos acompañe la nueva gestión municipal. Con la lluvia solamente Cáritas nos brinda ayuda. Somos más mujeres que hombres las que vivimos en el asentamiento, madres solteras y todas con hijos", contó a Salta/12 Jesica Lamas, vecina del asentamiento San Javier. 

Por las precipitaciones de ayer, Cáritas Argentina y personas donantes anónimas armaban una colecta que tuvo por centro la Iglesia León XIII. Desde ese lugar, organizaron, y organizan también hoy, la asistencia que brindan a las 300 familias que habitan en el asentamiento. "Solo pedimos agua mineral y elementos de limpieza", dijo a este diario Alicia Coria. La parroquia, que también lleva por nombre Vïrgen Valle, se encuentra en la intersección de las calles Mendoza y Lerma, en el sur del macro centro capitalino.

Las lluvias de las últimas semanas de diciembre agigantan problemas que acarrean desde hace meses las familias que habitan en esos asentamientos precarios. "Muchas vecinas, abuelas y niños tienen problemas estomacales, también diarreas, todo por el agua que consumimos", continuó Jesica Lamas. "Aunque hervimos el agua, no podemos hacer mucho porque viene turbia", detalló. "No siempre podemos acarrear agua segura" porque en general, el líquido que consumen, proviene de las cercanías del vertedero o basural capitalino, explicó. Sus casas precarias, la vida en el asentamiento, el peligro por robos, el consumo de drogas, completan un panorama difícil para las mayoría de mujeres que pelean la diaria. "A veces trabajamos en el basural, en la cooperativa. Pero como ahora no nos dejan, nos turnamos para salir algunas horas a buscar una changa: limpiar una casa, vender ropa en la feria", contó. 

Alicia Coria, de Cáritas Argentina, recordó durante un diálogo con Salta/12 que los distintos gobiernos municipales no asisten con la regularidad necesaria a esa población del asentamiento, que siempre va en aumento. La razón: arman sus viviendas con plásticos y maderas en terrenos tomados que no están habilitados porque, en su mayoría, son bajos que se inundan en temporada de lluvias. 

"Venimos aquí porque no podemos pagar el precio de los alquileres. Tenemos muchos niños, algunas mamás tienen siete, otras cuatro", continuó Jesica. La vecina del asentamiento contó también que el lunes último (otra jornada de lluvias en la ciudad de Salta) al remover cacharros, encontraron alacranes. "A mi hermano lo picaron dos y tuve que pedirle al chofer del colectivo que me llevara hasta el (Hospital) San Bernardo porque ya no sentía la mano", relató. El hospital de cabecera, Papa Francisco, no podía brindarle la atención adecuada, tampoco la salita pública más próxima, por lo que el peregrinar los derivó al policlínico público más importante de la ciudad. Con los niños enfermos por consumo de agua no potabilizada no pasa lo mismo. "Tenemos que viajar directamente al (Hospital) Materno, es el único lugar donde los atienden". Para esos vecinos y vecinas, ir al Materno Infantil implica realizar un viaje mucho más largo, porque se encuentra literalmente al otro lado de la ciudad.

Hasta ayer, las donaciones que colecta Cáritas Argentina para esa barriada en la parroquia no pudieron llegar a destino por las intensas lluvias, que no cesaron en toda la jornada. "La camioneta se quedó empantanada y no pudieron sacarla", relató la vecina. Desde la Municipalidad de Salta, el subsecretario de Inclusión Social, Juan Pablo Linares, detalló que durante el temporal de ayer, el área de Desarrollo Social -de la cual depende su área- intervino con cuatro equipos en los principales sectores afectados por el temporal. Algunas de esas patrullas habían sido destinadas a los asentamientos San Javier y San Justo. Para Jesica Lamas, la intervención de la comuna capitalina es clave. "Necesitamos que vengan, necesitamos agua para poder cocinarle a nuestros niños. No siempre vienen hasta donde vivimos", insistió.

Hasta ayer, el municipio reportó haber visitado barriadas ubicadas al este de la capital salteña. En ese sector, en un barrido de Norte a Sur, la comuna intervino en pedidos de ayuda concretas que llegaron a los sistemas de emergencia en los barrios Juan Manuel de Rosas, 17 de Octubre, Urkupiña, Gauchito Gil, San Javier 2, Primera Junta, ARA San Juan, Floresta Media, Floresta Alta, Autódromo, Torino y El Milagro. "Todas las intervenciones fueron coordinadas con el Comité de Emergencias (provincial) para realizar las intervenciones o derivaciones correspondientes", explicó el funcionario. Al menos hasta ayer, 35 familias habían sido asistidas por distintos motivos debido al temporal. "No hubo evacuados", aclaró Linares.

En Floresta, un lugar con barriadas y asentamientos sobre la ladera de las serranías del este de la capital salteña, los vecinos postearon en sus redes sociales imágenes del agua que corría por las calles ayer por la tarde. En ese momento, se habían convertido en verdaderos ríos de agua y barro. "Asistimos a una familia de Villa Floresta porque cedió una pared por la lluvia. Destruyó parte de una galería, pero no hubo heridos", informaron a Salta/12 desde la Comisaría Cuarta de Villa Mitre. 

En esa zona, en la intersección de la Avenida de las Américas y el acceso al Parque Industrial, muchos automovilistas que transitaban por esa arteria tuvieron que ser socorridos por personal de la policía salteña. Fue el caso del conductor de una camioneta blanca que fue rescatado de una zona donde el agua acumulaba más de un metro por el esfuerzo de un grupo de uniformados que tiraron del vehículo amarrado por sogas. Otro caso fue el de una familia que quedó atrapada en la correntada, y también fue socorrida por personal de esa comisaría.

El alerta que emitió para ayer el Servicio Meteorológico Nacional situó la masa de nubes sobre el centro y el este provincial. El alerta naranja y amarillo (según las áreas) continúa vigente para hoy y, según el pronóstico del sistema nacional, se estima que las precipitaciones oscilen entre los 60 y 80 milímetros. Hasta ayer, solamente en la ciudad de Salta las precipitaciones rondaron esas marcas. Los datos de la Estación Meteorológica del Parque del Bicentenario (en el norte de la capital salteña) indicaba que habían caído 49.1milímetros hasta la medianoche de ayer. Desde la Estación Meteorológica de Finca Las Costas ubicada al oeste de la ciudad, se informó que hasta las 20.30 el pluviómetro marcaba 52,8 milímetros precipitados. Mientras que el meteorólogo Ignacio Nieva informó también ayer que hasta las 15 horas, el pluviómetro del Aeropuerto Salta marcaba 53 milímetros.

Crecida de ríos en el norte de Salta y Jujuy

Otros datos descatados de las precipitaciones de ayer provienen del norte provincial, relevados por el Sistema Nacional de Información Hídrica. Algunas estaciones hidrológicas ubicadas en las cercanías de la frontera con el Estado Plurinacional de Bolivia registraron entre 120 y 100 milímetros de lluvias acumuladas. Al cierre de esta edición, la Estación 607, ubicada en Alarache, registraba 120,25 milímetros precipitados y, para el río Bermejo, una altura de 1,95 metros. La Estación Hidrológica en el Parque Nacional El Nogalar, en la localiadad de Los Toldos (siempre en Salta), registraba hasta ayer 137 milímetros. "Las lluvias continúan y las crecientes de los ríos locales fueron impresionantes", confirmaba la situación a este medio el intendente de la localidad de Los Toldos, Virgilio Mendoza.

Por su parte, la Estación de Puente Colgante, sobre el río Lipeo (departamento Orán), registró a última hora de ayer un acumulado de 106,25 milímetros para las últimas 24 horas debido al temporal. Desde el área de Asistencia Crítica del Ministerio de Desarrollo Social de la provincia, Gabriela Locuratolo, informó que "las próximas horas" (por hoy) serían críticas para la población que habita -dispersa- en esa zona de Yungas del norte salteño. A ellas se accede, principalmente, desde la ruta nacional 50. 

Hasta ayer, algunos cauces registraban crecidas, como el Bermejo que a la altura de la Estación Alarache el Sistema Nacional de Información Hídrica reportaba una altura de 1,95 metros, mientras que algunos kilómetros abajo, a la altura de la Estación Aguas Blancas ese mismo cauce se elevaba a 4,95 metros. Otro de los ríos que tuvo hasta ayer un aumento de su caudal fue el Ledesma, con casi 4 metros de altura. Portales de noticias jujeños informaban que en la jornada de ayer, el temporal se había concentrado en las localidades de Fraile Pintado y Libertador General San Martín. Hasta anoche no se registraban evacuados, aunque sí calles y rutas anegadas por algunas horas.