En el partido de San Martín, uno de los principales nodos industriales de la provincia, la demanda interna no repunta, la creación de empleo está estancada y los empresarios no invierten. Es una muestra que no hay una firme reactivación económica en el conurbano bonaerense. Un relevamiento realizado por el Observatorio Socioeconómico del Municipio de San Martín sobre 248 firmas expone la persistencia de un escenario de tensiones en el entramado productivo pyme. La encuesta indica que 4 de cada 10 empresas consideran que su situación es peor y 3 de cada 10 que es igual que hace un año. La situación muestra una leve mejoría frente informe anterior realizado desde el municipio aunque persiste una visión negativa en más de la mitad de los industriales. Entre los factores que explican el magro desempeño fabril se destacan la caída del poder adquisitivo, el incremento en las tarifas, las subas de costos y la recesión.
Con más de 7000 pymes industriales y de servicios, San Martín es uno de los principales enclaves productivos del conurbano. La industria manufacturera, especialmente los rubros metales, caucho y plástico, textiles y alimentos, representa el 70 por ciento del valor agregado bruto del partido. Las actividades están concentradas en cuatro zonas del partido: Villa Ballester, Villa Maipú, Villa Lynch y Villa Chacabuco. La segunda encuesta trimestral a las pymes industriales de San Martín fue realizada entre el 28 de agosto y el 27 de septiembre.
Aunque algunos indicadores comienzan a mostrar mejoras incipientes, el 42 por ciento de las empresas encuestadas aseguró que sus ventas al mercado interno retrocedieron frente a 2016 mientras que un 29 por ciento sostuvo que su facturación se mantuvo sin variaciones. Los sectores que registraron las mayores caídas fueron papel y edición y vidrio. Por su parte, la golpeada actividad textil logró moderar su caída respecto a las fuertes bajas del trimestre anterior.
Los niveles de ocupación no ofrecen signos de recuperación y en San Martín un 15 por ciento de las pymes encuestadas indicó que redujo la cantidad de trabajadores, mientras que una cifra menor, el 12 por ciento, incrementó sus dotaciones. El documento difundido ayer explica que, a nivel agregado, se observó un incremento en la demanda de trabajo de un 0,9 por ciento durante el último año y en igual proporción en el último trimestre. “Las ventas no mejoras pero las empresas sanmartinenses prefieren mantener el personal”, sostienen desde el municipio.
El relevamiento registró variaciones positivas entre el segundo y el tercer trimestre. Desde el municipio sostienen que los empresarios destacan “una desaceleración del incremento de precios, una caída en la tendencia a la baja de las cantidades vendidas y la ocupación, y un descenso de respuestas negativas en las preguntas vinculadas a la percepción sobre la situación de la firma, su sector y la economía nacional”. No obstante, advierten, “persiste un panorama complejo para las firmas industriales que se refleja en la caída de su rentabilidad y en la caída de inversiones”. De acuerdo al estudio, 6 de cada 10 firmas no realizaron desembolsos productivos en el último año.
Consultados sobre sus principales preocupaciones los empresarios de San Martín apuntan hacia “la presión tributaria, la caída en las ventas y la inflación”. El informe del Observatorio Socioeconómico municipal refleja además que los empresarios reclaman además asistencia para acceder al financiamiento y presentan reparos frente a “los costos laborales” y “el aumento de las importaciones”.
