El Gobierno de El Salvador ejecutó la demolición del Monumento a la Reconciliación Nacional, que estaba en una plaza de San Salvador y había sido levantado por el Ejecutivo sandinista en 2017, una obra “estéticamente horrible” que homenajeaba a los “asesinos del pueblo”, según el presidente Nayib Bukele.
El ministro de Obras Públicas, Romeo Herrera Rodríguez, anunció la construcción de un nuevo espacio en el mismo sitio donde hasta ahora estaban tres estatuas de bronce que eran parte del Monumento, inaugurado en 2017 en la denominada Plaza a la Transparencia.
La obra había sido erigida en el marco de la conmemoración del 25 aniversario de los Acuerdos de Paz que pusieron fin a años de conflicto interno, durante la presidencia de Salvador Sánchez Cerén.
El conflicto interno en El Salvador enfrentó a las fuerzas de seguridad y militares con la guerrilla agrupada en el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), entre 1979 y 1992. En enero de 1992 se firmaron en el Castillo de Chapultepec, en México, los acuerdos de paz.
A principios de junio de 2020, el presidente Bukele ordenó la demolición de Civis, la estatua de una mujer desnuda que estaba atrás del Monumento a la Reconciliación, pero ahora se avanzó sobre todo el complejo.
El Monumento a la Reconciliación Nacional
La escultura de bronce, de Napoleón Alberto, está compuesta por tres estatuas: la de la mujer (la “Mater Civis”), desnuda de la cintura hacia arriba, y las de una guerrillera y un militar que sueltan una docena de palomas.
El concepto del monumento fue elaborado por Alberto y el diseño e implementación estuvo a cargo de la Dirección de Ciudades Inclusivas, que trabajó principalmente con materiales donados, y la colaboración de voluntarios y presos cerca de obtener la libertad, que elaboraron las baldosas y las guardas de cemento que se combinan con césped.
En la obra, el hombre y la mujer en traje de combate, desarmados, caminaban juntos y representaban a los bandos en conflicto. La Iglesia Católica entregó entonces 33 cajas medianas llenas de llaves en desuso para poder edificar un monumento de bronce.
Bukele, el demoledor
“El supuesto `monumento a la reconciliación`, inaugurado por el gobierno del FMLN en 2017, no solo era estéticamente horrible, sino que glorificaba el pacto entre los asesinos de nuestro pueblo, para repartirse el pastel; ha sido demolido. En su lugar, se construirá un nuevo espacio público, para el disfrute de la familias salvadoreña”, escribió Bukele en su cuenta de la red X (antes Twitter).
Bukele no está formalmente al mando de la presidencia porque está en campaña en busca de otro mandato.
El ministro Herrera Rodríguez adelantó que en el predio en el que estaba el monumento se hará un circuito peatonal de 2,5 kilómetros, con iluminación subterránea y en los espacios cercanos una zona comercial, plataformas peatonales, fuentes y un pequeño anfiteatro con cine incluido.
