El ministro de Defensa, Luis Petri, oficializó esta semana un cambio en los mandos de las tres Fuerzas Armadas y del Estado Mayor Conjunto, como parte de una medida que implicó el pase a retiro de 22 generales del Ejército, sin embargo, voceros de esa cartera negaron que estas modificaciones tengan que ver con "una purga" y aseguraron que se apunta a "buscar mayor eficiencia" por parte del instrumento militar "en un país sin conflictos" externos.

La designación del general de 58 años, Alberto Presti como nuevo jefe del Ejército resultó un hecho novedoso en las filas de la fuerza, porque se trató de una decisión que determinó el pase a retiro de 22 generales de promociones más antiguas que la suya.

La decisión del Ministerio de pasar a retiro a tantos generales era algo que no sucedía desde hace más de 20 años, cuando el fallecido expresidente Néstor Kirchner había pasado a retiro a 19 oficiales de Estado Mayor para poder designar a Roberto Bendini como jefe de Ejército.

La cartera informó que el total de oficiales superiores retirados entre las tres fuerzas ascendería a 50 en total y recalcaron que "se trata de una potestad del Poder Ejecutivo".

Presti fue hasta su designación como jefe de Ejército el comandante de la IV Brigada Aerotransportada, con sede en Córdoba, y perteneciente a la promoción 118, tres años más joven que el jefe de Ejército saliente, general Guillermo Pereda.

Paralelamente, otro llamado de atención se produjo por la designación que hicieron desde La Libertad Avanza (LLA) del Jefe de Estado Mayor Conjunto, el brigadier general Xavier Julián Isaac y, en consecuencia, el desplazamiento del Ejército como conductor de las Fuerzas Armadas.

El exjefe de la Fuerza Aérea durante la gestión del ministro de Defensa Jorge Taiana se recibió de la Escuela de Aviación Militar como oficial de la Fuerza Aérea Argentina en 1983 y tuvo varios destinos antes de llegar al escalafón mas alto.

Isaac se desempeño como instructor y además tiene, como muchos oficiales de la Fuerza Aérea Argentina, un largo recorrido de formación en los Estados Unidos.

El flamante jefe de Estado Mayor realizó su curso como oficial de Estado Mayor en el Colegio de Guerra Aérea de la Fuerza Aérea de Estados Unidos.

Tras completar esta formación, Isaac se desempeñó luego como agregado aeronáutico en la embajada argentina en Washington.

Sin embargo, el flamante titular del Estado Mayor Conjunto fue nombrado como jefe de Fuerza Aérea durante la última gestión de Agustín Rossi como ministro de Defensa, y se lo consideró como uno de los tres jefes más visibles durante la gestión que Jorge Taiana cumplió en esa cartera.

La Fuerza Aérea recibió recursos como parte de la aplicación del Fondo Nacional para la Defensa (Fondef), e Isaac se interesó en su momento en la adquisición de aviones cazas F16 a Estados Unidos.

El propio Isaac argumentó durante la gestión de Taiana que los repuestos chinos serían muy difíciles de conseguir si se adquirían aviones de combate de ese país asiático, dado el bloqueo estadounidense y británico que existe contra el régimen de Beijing.

Según indicaron fuentes de la gestión anterior de Defensa, la elección de los aviones norteamericanos está motivada en el menor costo que tienen en relación a los aparatos que provienen de China.

Desde el Ministerio de Defensa que encabeza Petri explicaron que la elección de Isaac se basa en su "profesionalismo y capacidad", aunque para algunos resultó "una sorpresa porque se lo veía como cercano al expresidente Alberto Fernández".

En reemplazo de Isaac en Fuerza Aérea quedó el brigadier mayor Fernando Luis Mengo, de 55 años, quién era hasta esta semana el comandante de Adiestramiento y Alistamiento.

Mengo ingresó a la Fuerza Aérea en 1983 y en su carrera se destacó como secretario general aeronáutico y agregado de Defensa en la embajada argentina en el Reino Unido.

Desde la cartera de Defensa admitieron que el pase al frente de la Fuerza Aérea repercutió en protestas desde la Armada Argentina, organismo que hace 26 años no ocupa la jefatura de las tres fuerzas.

Finalmente, el puesto de jefe de Estado Mayor de la Armada Argentina recayó en el almirante Carlos María Allievi, de 58 años, que hasta su designación ocupó el cargo de segundo comandante Operacional del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas y fue comandante de la Flota de Mar.

Paralelamente, el flamante jefe de la Armada también realizó un paso por la agregaduría militar en Washington y se desempeñó allí como agregado naval.

Además, Allievi presenta en su carrera un largo interés en los sistemas de comunicaciones, ya que realizó extensas capacitaciones al respecto y se graduó como Master en Relaciones Internacionales en la Universidad Maimónides, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.