Tras conocerse el caso de un hombre oriundo de Funes que falleció por Fiebre Hemorrágica Argentina, desde el gobierno provincial recordaron las medidas de prevención de la enfermedad y la importancia de aplicarse la vacuna CANDID #1, la cual se encuentra disponible en hospitales y centros de salud de toda la provincia. El conocido como “mal de los rastrojos” está afectando a una región del país que abarca al sur de la provincia de Santa Fe, sur de Córdoba, el Norte de La Pampa y el Noroeste de Buenos Aires.

El viernes por la tarde se conoció la información de que un hombre de 42 años, residente en la localidad de Funes y que trabajaba en Cañada de Gómez, fue la primera víctima mortal del año de Fiebre Hemorrágica Argentina o Virus Junín, un arenavirus que transmiten los roedores y que afecta una extensa región de la Argentina, incluyendo el sur santafesino. A partir de este caso, el gobierno provincial, a través del Ministerio de Salud, insistió con la necesidad de aplicarse la vacuna CANDID #1, ya que aseguran que es la manera más eficaz de protegerse de una enfermedad que puede afectar principalmente a personas que trabajan, viven o visitan el campo o estuvieron en contacto con sitios invadidos por roedores del campo que eliminan el virus en su saliva y orina, contaminando el medio ambiente en el que viven.

En relación a la vacuna, explicaron que se encuentra en el Calendario Nacional y está disponible en los hospitales y centros de salud de todo el territorio nacional. Se requiere una dosis única para estar protegido y se la deben aplicar personas mayores de 15 años que no hayan sido vacunados anteriormente y que residan o desarrollen actividades en las zonas del área endémica. Por su parte, desde el área de salud provincial recordaron que no deben vacunarse personas gestantes, mujeres amamantando ni aquellos que estén cursando un cuadro febril agudo, se encuentren inmunosuprimidos o que reciban altas dosis de corticoides.

Teniendo en cuenta el escenario epidemiológico actualizado, desde el Ministerio explicaron que se sostiene la vacunación de rutina según las normas nacionales y se recomienda la vacunación intensiva priorizando la inmunización de la población que reside, circula o desarrolla actividades con riesgo de exposición en zonas rurales o semiurbanas de las zonas endémicas, como trabajadores rurales, transportistas; personas que trabajan en acopiadoras de cereales, molinos, actividades recreativas, trabajadores migrantes estacionales, entre otros.

Además de la vacunación, el Ministerio de Salud recomendó una serie de medidas de prevención complementarias: mantener una higiene cuidadosa, principalmente de las manos y cambio de ropas, cada vez que se hayan frecuentado zonas con roedores; no introducir tallos, hojas o granos en la boca; no acostarse sobre bolsas o en el suelo; comer y dormir en habitaciones limpias, usar calzado cerrado; mantener desmalezados los alrededores de la vivienda para evitar que las lauchas se acerquen a ella; disponer de lugares libres de maleza para los juegos de niños; no destruir la fauna depredadores de roedores, tales como lechuzas, lechuzones, chimangos y gatos.

 

En relación a los síntomas, desde la cartera sanitaria provincial explicaron que la Fiebre Hemorrágica Argentina puede comenzar con cuadro de fiebre, decaimiento y dolor de cabeza y luego pueden presentarse dolores musculares, de articulaciones, detrás de los ojos, mareos, náuseas y vómitos. Por tal motivo, destacaron que ante la aparición de cualquiera de estos síntomas es importante consultar al médico y/o dirigirse al centro de salud más cercano.