El ministro de Economía, Luis Caputo, y el jefe de Gabinete de la Nación, Nicolás Posse, se reunieron esta tarde con los dos enviados del Fondo Monetario Internacional (FMI), en oficinas de la Casa Rosada. 

Durante el encuentro, que se extendió por una hora y media, se buscó destrabar la relación con el organismo, establecer un acuerdo nuevo de metas para el 2024 y conseguir un desembolso que estaba pendiente del año pasado.

La reunión comenzó alrededor de las 15 de este lunes en la Casa de Gobierno y además de los dos funcionarios, participaron el subjefe del Departamento del Hemisferio Occidental Luis Cubeddu y el jefe de la misión argentina Ashvin Ahuja. 

En el encuentro cara a cara de los principales representantes de ambas partes, el Gobierno argentino buscó destrabar fondos que tenía pendiente de envío el FMI por US$ 3.600 millones entre fines de 2023 y comienzos de 2024.

Si bien en conferencia de prensa el vocero presidencial, Manuel Adorni, confirmó que el Gobierno no solicitará "fondos frescos" de parte del organismo internacional, sí buscará destrabar los que ya planteaba el acuerdo.

Además, se confirmó que tampoco habrá un nuevo programa, sino que se trabajará para reflotar el plan que está caído, ya que un nuevo acuerdo implicaría pasar por el Congreso, que vive horas intensas por el análisis de la Ley Ómnibus y del mega Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023 que impulsa la Casa Rosada.

¿Cuáles son las claves de la nueva etapa con el FMI?

Argentina y el FMI renegocian la séptima revisión del acuerdo que podría derivar en un desembolso de unos U$S 3.600 millones, producto de US$ 2.600 millones correspondientes a noviembre y US$ 1.000 millones que se adelantarían del giro que debía efectuarse en marzo de 2024.

La delegación del FMI comenzó sus actividades en Buenos Aires reuniéndose con técnicos del Banco Central, hoy al mando de Santiago Bausili, un hombre de Caputo.

Entre los temas críticos a tratar se encuentran la acumulación de reservas y la gestión del tipo de cambio.

Las reservas netas del Banco Central cerraron 2023 con un saldo negativo, incumpliendo así las metas establecidas en un acuerdo anterior. Aunque tras la devaluación y manejo del cepo, el Banco Central adquirió dólares en el mercado.

El Gobierno argentino enfrenta desafíos como el déficit fiscal y la emisión monetaria, y espera lograr la aprobación del FMI para el desembolso pendiente, además de enfrentar vencimientos inminentes con el organismo que ascienden a US$ 7.700 millones para este año.

Con ese dinero el Gobierno debería hacer frente a los USD 1.950 millones de capital que vencen el último día de enero. Los vencimientos de diciembre (USD 920 millones) fueron cancelados con un préstamo de la CAF. 

En rigor la cuenta es más abultada si se toma en consideración que el 1° de febrero habrá vencimientos de intereses, por casi USD 850 millones, estimó un informe de 1816. Típicamente, a diferencia del capital, los intereses no pueden ser postergados hasta fin de mes.

Según fuentes del Ministerio de Economía, las reuniones continuarán hasta el miércoles, cuando está previsto que los emisarios del FMI cierren de manera oficial su visita al país.