La cúpula de la CGT le pidió formalmente al Congreso ser parte del debate de la Ley Ómnibus que el gobierno de Javier Milei envió para su tratamiento. Lo hizo a través de una misiva en la que dejó claro que ese proyecto “afecta y modifica distintos aspectos de la vida social, laboral y económica del conjunto de los argentinos”.
La solicitud fue enviada ayer y está dirigida al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, en lo que fue la antesala preparatoria para el tratamiento del tema en comisiones.
Desde que el proyecto salió a la luz, encendió las alertas de distintos sectores de la vida gremial, que expresaron su rechazo una vez conocido el contenido de sus artículos.
“No escapa a su conocimiento que esta CGT ha expresado públicamente (su) preocupación por la magnitud del proyecto”, por lo tanto “la intención es compartir nuestra visión en los distintos temas en las comisiones”, dice la misiva.
El texto está firmado por Pablo Moyano, Héctor Daer y Carlos Acuña, el triunvirato que encabeza la central obrera y que a lo largo de estos días dejó clara públicamente su oposición a buena parte del proyecto.
De hecho, lo sugirieron en un párrafo en el que también resaltan la relevancia que tiene la CGT, como “institución de la democracia y representa a los trabajadores de todo el país”.
El pedido al titular de la Cámara fue publicado por Daer a través de sus redes sociales y se estima que la respuesta se conocerá cuando las comisiones convoquen al debate público que suelen tener los proyectos más relevantes.
