El Gobierno anunció un recorte del 43 por ciento en los cargos directivos de la empresa estatal Aerolíneas Argentinas. También redujo en un 35 por ciento los reportes directos a la gerencia general de la compañía. "A partir de dichas medidas, Aerolíneas Argentinas pasará de 14 direcciones a 8 y de 17 reportes directos a 11, como parte de su plan de racionalización y en línea con las políticas de reducción del Estado y ahorro fiscal", informó el Ministerio de Infraestructura, a cargo de Guillermo Ferraro.
Si bien el Gobierno trata de vender esta medida como un golpe de mando, se trata apenas de un reordenamiento que equipara la situación con el período 2008-2015, antes de la expansión de los cargos directivos que realizó el macrismo.
"Las ocho direcciones que a partir de ahora formarán la nueva estructura orgánica de Aerolíneas Argentinas serán: Prensa y Relaciones Institucionales, Asuntos Legales, Económico Financiera, Comercial, Recursos Humanos, Técnica y Flota, Coordinación de Operaciones y Política Aérea y Servicios Corporativos", detalló el Gobierno.
Desde la campaña presidencial, está claro que Milei quiere que el Estado nacional se desprenda de Aerolíneas Argentinas. Si esa idea avanza, la empresa volvería sobre sus pasos, ya que en 1990 fue pionera del proceso de privatizaciones y testigo de una gestión ruinosa por parte de grupos empresarios. Tal es así que en 2008 el Estado la recuperó sin poner plata, luego de las maniobras de vaciamiento del Grupo Marsans.
Tanto en el DNU 70 como en la Ley Ómnibus, el Gobierno avanza hacia la privatización de las empresas públicas, entre ellas, Aerolíneas. El latiguillo utilizado es el del déficit fiscal, a pesar de que la empresa cerró recientemente el mejor año desde su estatización a fines de 2008. Durante el año pasado, la línea aérea de bandera recibió el 65 por ciento de los 72 mil millones de pesos asignados por el Estado nacional en el Presupuesto 2022. Es decir que utilizó 47 mil millones de pesos.
Aerolíneas Argentinas opera 39 destinos nacionales y comunica diferentes puntos del país sin necesidad de pasar por Buenos Aires. En 22 de esos 39 destinos solo opera la aerolínea estatal, a pesar de que las privadas tienen permiso para hacerlo. Si se miden los distintos niveles de impacto en términos de puestos de trabajo, se estima que en 2022 Aerolíneas Argentinas generó un total de 107.235 empleos en el sector aerocomercial y aeroportuario.
"El DNU elimina la ley 19.030 que le da anclaje jurídico y razón de ser a Aerolíneas Argentina, elimina la obligación del Estado de financiarla, baja los puntos que refieren a la reestatización, declara los cielos abiertos, permite la operación con extranjeros y modifica el 30 por ciento el Código Aeronáutico. Aerolíneas va a desaparecer, el tema es cuándo y a qué velocidad”, indicó en una reciente entrevista el titular de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), Pablo Biró.