Titulares y choferes de taxis se manifestaron ayer en contra de las aplicaciones de transporte y la falta de controles por parte del municipio sobre el servicio ilegal de Uber. La protesta se realizó durante la mañana frente al Palacio de los Leones, por lo que el servicio se vio restringido durante el tiempo que duró la manifestación. Los reclamos del sector fueron escuchados por el secretario de Control municipal, Diego Herrera. Hoy habrá un nuevo encuentro con funcionarios del área, con la advertencia de que continúen las medidas de fuerza.

Desde las 9 hasta cerca del mediodía de ayer, distintas agrupaciones que nuclean tanto a peones como a dueños de licencias de taxis se congregaron frente a las puertas de la Municipalidad para expresar su rechazo los servicios alternativos de transporte que funcionan mediante aplicaciones ilegales y, principalmente, la escasez de controles a vehículos que funcionan bajo la modalidad de Uber. Desde el Palacio Municipal fueron recibidos por el secretario de Control del municipio, Diego Herrera, quien escuchó los reclamos de los choferes y titulares de taxis, cámaras de radiotaxis, administradores y mujeres taxistas, mientras que el sindicato de choferes no participó.

En contacto con los medios, Marcelo Díaz, titular de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis (Catiltar), expresó: “Más allá de la situación económica que vive el país, que lo reconocemos, si no hay un control estricto, como había años atrás, donde se incautaban varios autos que trabajaban con aplicaciones ilegales, esto tiene poca vida y es una agonía”. Al mismo tiempo, advirtió que mientras estaban “en la reunión había siete Ubers dando vueltas por la zona, que tenían la aplicación abierta y estaban trabajando con total impunidad” y agregó que incautar “un Uber por día no alcanza”. Por eso, reclamó “que al menos se secuestren entre 10 y 15”.

En la misma línea, el representante taxista alertó que el servicio de Uber no está controlado ni monitoreado por el municipio, no tienen inspección técnica correspondiente y no se sabe quién trabaja: “No sabemos si es un delincuente, un violador o un drogadicto el que maneja". Además, criticó al jefe municipal por no tomar medidas al respecto: “Se lo venimos manifestando hace tiempo al intendente Pablo Javkin, pero tenemos falta de respuestas claras para erradicar esas aplicaciones que precarizan y que ponen en riesgo a la ciudadanía”, sostuvo Díaz.

Si bien Díaz destacó la predisposición del secretario Herrera, aclaró que la desesperación de los taxistas es enorme: “La gente está muy caliente, nerviosa, desesperada. Se están fundiendo las licencias nuevas que se entregaron. Prácticamente la mayoría de las mujeres taxistas que eran empleadas, ya no pueden pagar ni el canon municipal ni la cuota del auto. Todos esos administradores, gente que ponía en choferes y trataban de trabajar en los programas, que ofrecían un buen servicio, se van a caer. Todos se van a ir fundiendo a poco”, reflexionó.

La de ayer fue la primera medida de fuerza que toman en el año pero se suma a los reiterados reclamos contra Uber que tuvieron lugar el año pasado. Durante la jornada de hoy está previsto un nuevo encuentro entre los taxistas y funcionarios del área municipal. En ese marco, Díaz advirtió que, si no hay acuerdo o no se cumplen con los controles, los taxistas están decididos a continuar con las movilizaciones y concentraciones, con suspensión del servicio mientras dure la protesta.