El gobernador de La Rioja, Ricardo Quintela, logró sortear una protesta policial que amenzaba con transformarse en un acuartelamiento. El motivo del relcamo era el atraso salarial que dicen sufrir los efectivos provinciales. Primero fueron los jubilados, que comenzaron con la queja en las plazas de la capital provincial y rápidamente se contagiaron las comisarías. Desde un primer momento las autoridades provinciales tomaron contacto con los representantes de los efectivos y sobre el final de este viernes se alcanzó un acuerdo. Quintela responsabilizó al gobierno de Javier Milei por la falta de envío de fondos: "El Estado nacional debe garantizar que esos fondos lleguen para no seguir congelando sueldos pues ya se siente y con más fuerza la desesperación e incertidumbre", indicó y advirtió que "el pueblo no puede ser rehén de los intereses del gobierno de turno".
Las reuniones entre funcionarios del gobierno provincial y representantes de los policías duraron casi toda la jornada de este viernes. El encuentro se realizó en la sede del gobierno mientras en la vereda y cercanía de la Casa de Gobierno se arremolinaban policía en actividad, sus familiares y también los que se jubilaron.
Durante las horas de negociación, Quintela les detalló la difícil situación que vive la provincia porque el gobierno de Javier Milei no remitió 9.300 millones de pesos que le adeuda a La Rioja en concepto de fondos coparticipables. Pero también les advirtió que hay una reducción de la coparticipación ordenada por el gobierno nacional.
De todas formas, Quintela logró tejer un acuerdo. Como informaron medios de La Rioja, en febrero se abonará el 70 por ciento con la acreditación de los sueldos de enero, y el 30 por ciento restante se sumará al adicional conocido como Quincenita.
El dinero para saldar esta deuda surgirá, según se informó, de una reducción de cerca del 50 por ciento de los gastos de funcionamiento del Estado provincial. También dispondrá una disminución en la estructura ministerial para poder conseguir los recursos que necesita para hacer efectiva esta recomposición salarial de los policías.
En su cuenta de X (ex Twitter) Quintela señaló que "para que los aumentos vayan en consonancia con la inflación que venimos viviendo desde hace mucho y el crecimiento de la misma con las medidas de shock y perjudiciales del actual gobierno nacional, han logrado que los sueldos de las y los trabajadores queden muy por debajo de la inflación provocando una fuerte pérdida del poder adquisitivo con una devaluación del 120 por ciento".
En ese sentido, el gobernador recordó que Milei le debe a La Rioja 9.300 millones de pesos con los que podría otorgar los aumentos salariales, pero dijo que la Casa Rosada "hace oídos sordos a este pedido dejando a un lado la necesidad de las provincias; además, se siembran sospechas de malos manejos de la administración de nuestro Gobierno que siempre hizo los esfuerzos necesarios para poder contener a todos los sectores, especialmente a los más vulnerables".