El presidente Mauricio Macri se reunió ayer con el ministro de Justicia, Germán Garavano, con quien analizó los detalles de la desaparición forzada de Santiago Maldonado. En la reunión, el mandatario preguntó por el traslado del cuerpo encontrado en el río Chubut y por la autopsia que le practicarán. Luego el ministro tuvo un diálogo con la prensa en Casa Rosada, en el que se ocupó de responder (en forma mesurada) a la familia de Maldonado: “La familia está pasado un momento muy difícil. Uno no se puede imaginar pasar un momento así; entonces, hay que ser muy respetuosos”, sostuvo el funcionario luego de que los familiares afirmaran que fueron hostigados por el Gobierno desde el comienzo. Por su parte, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, acusó a la oposición de utilizar electoralmente el dolor de la familia Maldonado.
En el Gobierno está instalada la creencia de que el cuerpo encontrado en el río es el de Maldonado, aunque todavía no tienen una confirmación científica. La decisión fue no comunicarlo hasta que lo haga el juez Gustavo Lleral, cuando se completen las pericias para identificarlo. Luego de eso, el macrismo comenzará a plantear nuevamente su estrategia ante el caso: “La sociedad está dividida. Una parte cree que fue la Gendarmería y otra, que fueron los mapuches. Nadie va a creer que se ahogó”, sostenían en la Rosada. Las encuestas que encargaron desde el PRO para medir el impacto electoral arrojaban un número más cercano al 73 por ciento sobre la responsabilidad de Gendarmería. Y un 12 por ciento de personas que podían repensar su voto, un dato que los macristas se ocuparon de difundir. “El tema no afecta los votos del domingo, pero sí nos empañaría el festejo si ganamos”, indicaban desde el oficialismo.
La decisión de que Garavano finalmente hablara tuvo que ver con no dejar pasar más tiempo sin que hubiera una voz oficial sobre el caso. Seguramente influyó además la conferencia de prensa que dio la familia de Maldonado, en la que señaló que fueron hostigados por el oficialismo desde el primer día.
Para contrapesar, el Gobierno eligió a Garavano, uno de sus voceros más prudentes (a diferencia de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich). Tras el encuentro con Macri, en el que también estuvieron el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis, Garavano dijo que “el Presidente ha seguido todo esto con preocupación y nos ha dado la orden de poner todo a disposición de la Justicia para que se pueda esclarecer lo antes posible”. “Desde el momento en que se supo del hallazgo del cuerpo, el Presidente ha seguido la situación con mucho detenimiento y, junto a la ministra Bullrich, lo hemos mantenido informado al instante”, detalló el ministro de Justicia.
Garavano le pidió a los periodistas “bajar la ansiedad” y “no generar apresuramiento” ante una autopsia y una serie de pericias sobre el cuerpo que deben permitir conocer su identidad y la causa de la muerte. “Están dadas las máximas garantías para que se sepa realmente lo que pasó”, aseguró Garavano.
El funcionario fue muy cuidadoso también al referirse a los familiares de Maldonado, con los que viene intentando tender puentes luego de que fracasara el secretario de Derechos Humanos, Claudio Avruj. “Es una situación difícil. Tenemos que ser muy prudentes. La familia está pasado un momento muy difícil. Uno no se puede imaginar pasar un momento así; entonces, hay que ser muy respetuosos, que fue también lo que pidió el mismo Sergio Maldonado”, indicó Garavano. “Acompañamos el dolor, el difícil momento que está pasando la familia de Santiago Maldonado. Hemos acompañado a las querellas en las cosas que han necesitado y lo seguiremos haciendo”, insistió el funcionario macrista.
Si Garavano tuvo el rol de dar la visión oficial ante el hallazgo del cuerpo, a Frigerio le correspondió el de responder a los sectores de la oposición que vienen descargando sus críticas sobre el oficialismo por el manejo del caso. “Muchos sectores de la política intentaron utilizar ese drama y congoja familiar durante más de dos meses para aprovecharlo desde el punto de vista político partidario”, sostuvo el ministro del Interior, desde Corrientes, donde continuaba con las actividades de campaña.
“Este es un caso que está en la Justicia y sobre el que hay que tener mucho respeto, porque la Justicia va a llegar a la verdad, que es lo que todos queremos conocer”, aseguró. La candidata oficialista en la Ciudad de Buenos Aires Elisa Carrió, en tanto, se sumió en el silencio luego de la disculpa que ofreció a la familia por Twitter.