La temporada de premiaciones de Hollywood tuvo este domingo un nuevo capítulo con la 29º edición de los Critics Choice Awards, cuya gala se realizó en el Barker Hangar de Santa Mónica, California, con la conducción de la comediante y actriz Chelsea Handler. Al igual que la semana anterior en los Globos de Oro, Oppenheimer terminó como el gran ganador entre los largometrajes al quedarse con ocho estatuillas, incluyendo Mejor Película y Dirección para el británico Christopher Nolan. A Barbie –que había llegado con el récord histórico de 18 nominaciones– le fue un tanto mejor que hace ocho días, pero sus seis reconocimientos tienen el retrogusto amargo de la derrota: fueron casi todos obtenidos en ternas secundarias y continúa perdiendo distancia respecto a su principal competidora de cara al Oscar, que por estos días desarrolla la votación de sus electores para conformar las ternas que se anunciarán el próximo martes. En materia de series, Succession, El Oso y Bronca fueron las preferidas de los 250 miembros de la Broadcast Film Critics Association.
Otro bombazo a la muñeca
Hace varios años que al interior de la industria norteamericana se habla de una “disociación” entre la taquilla y la elección de las asociaciones que tienen sus ceremonias de premios durante los primeros dos meses del año. Luego de que la semana se conocieran las ternas de los muy relevantes premios de los sindicatos de Actores, Productores y Directores, ya no caben dudas de que 2024 romperá esta tendencia, ya que lo que hubo –y lo que habrá– es un mano a mano entre Barbie (la película más vista a nivel mundial del año que se fue) y Oppenheimer (tercera en la tabla de recaudación por detrás de Barbie y Super Mario Bros). Lo sorprendente, en todo caso, es que el primer tramo de la seguidilla de entregas que culminará el 10 de marzo con la 96º edición de los Oscar haya tenido una ganadora tan clara.
Si la biopic del creador de la bomba atómica había ganado al trotecito el primer enfrentamiento -cinco Globos de Oro contra dos sobre ocho y nueve nominaciones, respectivamente-, lo del segundo fin de semana del año fue algo más parejo en términos numéricos, aunque no en la relevancia de las estatuillas de cada una. Oppenheimer terminó el domingo con los Critics’ Choice a Mejor Película, Dirección, Elenco, Actor de Reparto para Robert Downey Jr., Fotografía, Música, Edición y Efectos Visuales, al tiempo que Barbie se impuso en las categorías a Mejor Comedia, Guion Original, Diseño de Producción, Vestuario, Peinado y Maquillaje y Canción Original. En el tercer escalón del podio terminó Los que se quedan (tres estatuillas), por delante de Pobres criaturas, American Fiction, Anatomía de una caída y Spider-Man: A través del Spider-verso, que se llevaron una cada una. ¿Y Los asesinos de la Luna? Nada de nada para el último trabajo de Martin Scorsese.
Ese palmarés generó un problemón para los productores de la gala. Como es imposible que la enorme cantidad de categorías (41 en total, divididas en 21 para películas y 20 para series/TV) pueda resolverse en las dos horas y media reservadas para la transmisión, es habitual que los ganadores de los premios no del todo relevantes se anuncien a través de placas informativas. Los responsables de Oppenheimer se cansaron de aparecer en pantalla, pero el reloj avanzaba y los de Barbie brillaban por su ausencia. Ni siquiera hubo oportunidad para Margot Robbie, que volvió a ver cómo Emma Stone agradecía la estatuilla a Mejor Actriz por Pobres criaturas, cuyo estreno en la Argentina será el jueves 18.
Fue entonces que, seguramente atentos al intenso y numeroso fandom digital de la película de la muñeca, los organizadores decidieron que el asunto no podía terminar sin una buena foto de la australiana y la directora Greta Gerwig –otra que tuvo un déjà vu al escuchar que Nolan triunfaba en el rubro de las sillas plegables– sobre el escenario del Barker Hangar, y cambiaron la hoja de ruta para darles la oportunidad de subir a recibir el Critics’ Choice a Mejor Comedia. ¿Hubiera sido lo mismo si, como el domingo de la semana anterior, ganaba Pobres criaturas?
Esa maniobra, acomodaticia y hasta irrespetuosa incluso para las ganadoras, fue también reflejo del aire un tanto más distendido que en los Globos de Oro que se respiró durante la velada. Acorde a ese espíritu, Robert Downey Jr. aprovechó su triunfo como Actor de Reparto para agradecerle a los críticos por las “hermosas devoluciones y los grandes momentos” que le hicieron pasar durante su carrera. “Esta mañana me desperté pensando que amo a los críticos”, arrancó Iron Man en modo sardónico antes de sacar del bolsillo un papel con algunas de esas “hermosas devoluciones”: “La primera frase es una especie de haiku: ‘Descuidado, desordenado y perezoso’. La segunda es más metafórica: ‘Como Pee-wee Herman –en referencia al personaje creado por el cómico Paul Reubens– saliendo de un coma’. Esta es de un británico: ‘Un desconcertante desperdicio de talento’. Y, por último: ‘Divertido como un pedo encerrado en la cama’”, remató Downey Jr.
El que también habló sobre los críticos fue Paul Giamatti, dueño del premio a Mejor Actor por su notable labor en Los que se quedan, uno de las tres que se llevó el film de Alexander Payne (los otros fueron para Da’Vine Joy Randolph y Dominic Sessa como Actriz de Repato y Actriz/Actor Joven). “Pensaba que esta semana no podía terminar mejor después de hacerme viral por haber ido a comer una hamburguesa con queso”, dijo Giamatti, cuyas fotos en un local de comidas rápidas vestido de gala y con el Globo de Oro en la mesa fueron una de las comidillas digitales de los últimos días. “Ustedes son duros, pero es su trabajo serlo. Es muy bueno porque discuten, piensan y aman a las películas. Es realmente lindo ver cómo amaron esta película y cómo ayudaron a que pudiera encontrar una audiencia”, agregó uno de esos actores de prestancia proverbial al que, por fin, parece estar llegándole su momento de gloria.
Cocinas y sucesiones
Tal como dijo el periodista Federico Lisica, la huelga de guionistas y actores de Hollywood obligó a desplazar la 75º entrega de los premios Emmy de su habitual fecha de mediados de septiembre a este lunes, dejando a la gala más importante de la industria televisiva norteamericana en medio de la temporada de alfombras rojas de Hollywood. La nómina de ganadores de los Critics’ Choice en materia de series fue muy parecida a la de los Globos de Oro y, por qué no, un adelanto de lo que será el palmarés del reconocimiento de Academia de Artes y Ciencias de la Televisión de Estados Unidos.
Para sorpresa de nadie, Succession, El Oso y Bronca fueron los nombres propios más oídos durante el domingo a la noche. La última temporada de la serie que siguió las inescrupulosas aventuras del clan Roy se quedó con tres estatuillas (Mejor Serie en Drama, Actor y Actriz protagónicos en la misma subcategoría para Kieran Culkin y Sarah Snook), mientras que la segunda temporada de la serie que registra el regreso al terruño del reputado chef Carmen “Carmy” Berzatto para hacerse cargo del tugurio gastronómico de su hermano fallecido se fue a casa con cuatro Critics’ Choice. Si Succession se impuso en los apartados dramáticos, El Oso lo hizo en los de Comedia (aunque de comedia tiene poco y nada): Mejor Serie, Actor para Jeremy Allen White, Actriz para Ayo Edebiri y Actor de Reparto para Ebon Moss-Bachrach. Por último, Bronca hegemonizó los rubros de las miniseries al imponerse como Mejor Miniserie y en tres de los cuatro interpretativos, cortesía de Steven Yeun (Mejor Actor, Ali Wong (Actriz) y Maria Bello (Actriz de Reparto).