El reconocido dramaturgo Mauricio Kartún repudió el recorte en las áreas de cultura que impulsa el Gobierno de Javier Milei y defendió al Instituto Nacional del Teatro y la ley Nacional del Teatro. Además, apuntó contra el secretario de Cultura, Leonardo Cifelli, por defender el recorte.

Tras una larga explicación sobre la importancia vital de la ley Nacional del Teatro para el país, Kartún puso el foco en los motivos que tiene el Gobierno para avanzar en esta dirección: “En última instancia me parece que omitir la importancia de la cultura, como la ha hecho este decreto, es pensar en la posibilidad de un pueblo sin consciencia”.

“De pensar un pueblo que no tiene alternativa de pensamiento fuera de las oficiales. ¿Qué te crea un pensamiento alternativo? La posibilidad de poder vivir la cultura como lugar de despegue de la cabeza fuera de las redes conceptuales”, analizó el dramaturgo, en diálogo con Nora Veiras.

Para Kartún, el teatro cobra un lugar vital en la generación de consciencia: “Ese es el fenómeno de la cultura, que no es exterior a los pueblos, es interior. Desarmar la cultura es empezar a pensar en un pueblo que no piensa”

Por eso se manifestó tan crítico contra el secretario de Cifelli. “Si yo lo escucho a Sturzenegger decir alguna barrabasada de la cultura no me escandaliza, porque pienso que es un hombre de las finanzas. Funciona su cabeza de determinada manera”. Pero, añadió: “Que me lo diga un productor de teatro (por Cifelli), lo vuelve horroroso. Porque él tiene clara consciencia de este fenómeno. Tiene claro esto de los circuitos. Lo que ha creado el teatro. Lo que se ha luchado. Alguien que no puede alegar ningún tipo de omisión. No puede decir que no sabía. Lo sabe bien y me parece que saberlo y defenderlo lo vuelve siniestro”.

La defensa del Instituto Nacional del Teatro

Antes de esta dura crítica a la gestión de Javier Milei, Kartún explicó algunos de los motivos que están detrás de su defensa al Instituto Nacional del Teatro y la ley nacional que le da razón de ser.

“Cada uno se toca donde le duele el zapato. El cierre del Instituto Nacional del Teatro, la derogación de la ley nacional, es verdaderamente una catástrofe. Es una ley que ha cambiado el teatro en toda la Argentina. En este momento Argentina es la capital teatral de Iberoamérica que puede competir con cualquier país europeo”, remarcó.

Y añadió: “No es simplemente la ley como un estatuto que produce algo, sino que, en 26 años, se fue afinando de tal manera que produjo un círculo virtuoso, un ecosistema. En este momento, el Instituto gasta muy poco y produce muchísimo. Y lo hace en todos los rubros. No requiere de fondos estatales”. Para graficarlo, puso algunos ejemplos a título personal: “Ha posibilitado que el teatro independiente tenga un extraordinario nivel y que se ofrezca a valores impensables fuera de nuestro país”.

“Hasta hace un mes, mi espectáculo estaba en la calle Corrientes ofrecido a $3.000. Y si eras pillo conseguías algún 2x1 también. Ese espectáculo estuvo representando en 2023 al país en dos festivales internacionales. ¿En qué lugar del mundo encontrás un espectáculo de nivel internacional ofrecido a un valor absolutamente popular?”, se preguntó.

Luego, finalizó: “Solamente en un lugar donde hay una actividad independiente muy fuerte que se manifiesta como alternativa al teatro comercial. Esto se produce porque hay subvención y un circuito que produce una circulación de gente en lugares impensables. Porque hay salas chicas que están ayudadas”.