El escritor y analista político Carlos Caramello analizó el estado actual de la dirigencia, la coyuntura y el presente del peronismo. En este marco, señaló que "hay que recuperar los partidos políticos" y "volver a las charlas". En diálogo con AM750, expresó que "es mentira" esa idea de que el peronismo "quiere pobreza".
"El peronismo desea que todos tengamos una vida muchísimo mejor. No hay pobrismo. No hay sometimiento. No hay austeridad en los términos en los que la derecha pretende, y la llamo así porque oligarquía me suena demasiado anacrónica. Esa derecha que pretende esa austeridad falsa, impostada, de que tenemos que ser pobres para ser decentes", sostuvo.
En este sentido, recordó los barrios que construyó Juan Domingo Perón y los famosos chalecitos californianos que marcaron un ascenso social para los trabajadores. "Muchos barrios obreros se terminaron convirtiendo en suertes de barrios cerrados. Porque estaban diseñados para extenderlos. Porque por entonces las familias se extendían. Nuestros padres nos pensaban viviendo al lado de ellos. Y muchas familias bien, sobre todo del conurbano norte, de algunos lugares del interior de la Provincia de Buenos Aires, tomaron esos barrios y los convirtieron en barrios cerrados. Esos chalets tenían fondo.
"Hay que recuperar los partidos políticos"
En tanto, el analista político analizó la situación que llevó a que Javier Milei sea presidente de la Argentina, así como el avance de la ultraderecha en el país.
"Todo esto es parte de la desperonización del peronismo. Hay dirigentes, pero no son los que conocemos, en su mayoría. Con excepciones. Hay muchos candidatos. Y cuando elige la candidatura en los términos en los que lo eligió Alfonsín, en los términos de la comunicación, de aquel (Carlos) Menem que fue el mejor alumno, que entendió todo en materia de marketing, abrió una gran franja donde se incorporaron figuras del espectáculo, del deportista, y fuimos abandonando al dirigente de base. A aquellos que trabajan primero en un consejo delirante, y después se postulaban, y remaban para ser diputados y hacían una suerte de vida política. Lo hacían como una carga pública. No queríamos ser empleados del Estado. Además, era anti-económico. Si eras cajero de banco ganabas mucho más", explicó.
"Y cuando fuimos perdiendo eso, cuando el marketing, cuando los opinólogos especialistas, empezaron a intermediar la política con el pueblo, empezamos a peder la mirada que tenía, por ejemplo, (Ramón) Carrillo. No solo diseñó la política sanitaria, diseñó los hospitales. Techos altos, paredes anchas, mucha ventilación. No había virus inter hospitalarios", agregó.
Para enfatizar su idea, Caramello subrayó: "Es por esta política individual que nos pasa lo que nos pasa".
"El peronismo es el peronista que se mira a sí mismo. Cuando no se mira en comunidad, pierde el entendimiento. Y cuando pones exégetas para que te expliquen lo que les pasa a los compañeros en el territorio, ahí estás perdido. Rosas aprendió los lenguajes de los peones. Las lenguas nativas. Solo para hablar él con los indios", afirmó.
"Hay que recuperar los partidos políticos. Me parece una cosa tan infeliz que Alberto (Fernández) siga siendo el presidente del PJ. Hablo también del radicalismo y los partidos de izquierda. Recuperemos la charla", concluyó.