El paradero de Ramón Román y Gabriel Raimann, los amigos pesqueros que el domingo pasado se adentraron al mar en un kayak a la altura de la ciudad balnearia de Cariló, es todo un misterio. Pese al despliegue de un megaoperativo de búsqueda en manos del Estado, que incluye personal de distintas fuerzas de seguridad y que abarca una franja territorial que va desde el Partido de La Costa hasta Villa Gesell, todavía no se pudo hallar a los dos hombres, de 56 y 38 años, respectivamente.
En plena temporada de verano, la tragedia sacude a las familias de los kayakistas y angustia a los vecinos y turistas del partido de Pinamar. En este marco, muchas personas se solidarizaron con la causa y aportaron sus propias embarcaciones y aeronaves para colaborar con la búsqueda. Y es que, además del operativo del que participa Prefectura Naval, la Policía Bonaerense y la Secretaría de Seguridad de Pinamar, los familiares contrataron por cuatro horas avionetas que cuestan $350.000 la hora con el objeto de ampliar el rastreo de sus seres queridos.
Sin embargo, pese a la incertidumbre del caso, las esperanzas siguen presentes a través de mensajes de aliento y cadenas de oraciones en las redes sociales. Así lo sostiene también la familia, que en las últimas horas de este martes, aportó un dato clave que relaciona el paradero de los pescadores con la costa uruguaya de Punta del Este. Todo lo que se sabe de la desaparición de Román y Raimann.
Quiénes son
De acuerdo con la información que brindaron los familiares de los desaparecidos a la prensa, Román, es oriundo de Misiones y estaba radicado en Pinamar desde hace más de 20 años. Por otro lado, Raimann nació en la misma provincia y tenía en mente mudarse a la ciudad costera este año.
Ambos se habían conocido hace poco tiempo pero se consideraban grandes amigos. Rainmann estaba en Pinamar haciendo trabajos de construcción en un edificio en el que Román trabajaba como encargado.
El hijo de Román, Lucas, contó que ni su papá ni su amigo tenían experiencia en pesca marítima. “Mi viejo es un entusiasta de la pesca y demás. Si bien tenía kayak, no era tan experimentado. Tanto él como el compañero son inexpertos, pero se mandaron igual”, afirmó en diálogo con Telefé.
Cuándo y cómo desaparecieron
Durante los primeros destellos del amanecer del domingo 14 de enero, Román y Raimann se embarcaron para pescar mar adentro en un kayak de color naranja. Consigo llevaron únicamente un chaleco de colores fluorescentes como medida de prevención.
Los amigos habían dejado la camioneta Toyota Hilux de color negro en la que se trasladaban estacionada sobre la arena, a la altura de una bajada náutica en la zona que limita a las localidades de Cariló y Valeria del Mar. Adentro del vehículo, dejaron también sus celulares y pertenencias.
Aquella mañana, la actividad pesquera deportiva estuvo condicionada por el clima, ya que hubo alerta por vientos de 40 a 60 kilómetros por hora y ráfagas de 55 a 70 kilómetros por hora del sector oeste rotando al sur a partir del mediodía. Por ese motivo, las autoridades locales desaconsejaban navegar o realizar actividades náuticas.
Con el correr de las horas, la familia de Román se preocupó por su prolongada ausencia, pero la denuncia por desaparición y la búsqueda comenzó al día siguiente, cuando la policía les advirtió de que un vecino de la localidad había alertado al servicio de Dirección de Seguridad en Playas local sobre una camioneta estacionada sospechosamente hace horas en la bajada náutica.
El fiscal Juan Pablo Calderón, titular de la Unidad Funcional de Instrucción 4 de Pinamar, quedó a cargo de la causa que se inició por "averiguación de paradero".
El megaoperativo de búsqueda de los kayakistas
Desde el lunes 15 de enero se lleva adelante en el partido bonaerense de Pinamar un megaoperativo de búsqueda de los kayakistas, por mar, tierra y aire. De este procedimiento forma parte el personal de la Policía Bonaerense, Prefectura Naval Argentina, Guardavidas y la Secretaría de Seguridad del Municipio de Pinamar.
El rango de rastreo se amplió este martes a todo el Partido de la Costa, desde Villa Gesell a San Clemente del Tuyú. Entre varios elementos de búsqueda, como guardacostas, un helicóptero, gomones, motos de agua y drones, la Armada Argentina sumó un avión Beechcrat B-200 al despliegue aéreo en la zona de rastrillaje.
Asimismo, el Ministerio de Seguridad de la Nación indicó en un comunicado que PNA "desde el primer momento, está colaborando en la búsqueda de personas extraviadas en Valeria del Mar, a partir de un aviso realizado por la Policía provincial", y que "siguiendo el protocolo, la Fuerza Federal dispuso una operación por tierra, mar y aire".
Por otra parte, los familiares de Román contrataron una avioneta para que recorra la costa durante cuatro horas. Les costó $350.000 cada hora. También colaboró con el rastrillaje aéreo una persona con una avioneta privada. No obstante, no se halló ningún rastro de los pescadores.
Además, los familiares manifestaron su intención de contratar un helicóptero, dado que "las avionetas entran hasta mil metros aproximadamente" y un helicóptero, "en cambio, entra muchísimo más lejos”, según señalaron. “Pero sale un millón pesos”, lamentaron.
Las falsas pistas y el rastro que siguen los investigadores
Durante la tarde del martes, a partir de la difusión pública del caso, vecinos y turistas acercaron a quienes intervienen en la búsqueda distintos elementos que parecían pertenecer a una embarcación como la que utilizaban los dos hombres buscados. Sin embargo, ningún rastro concreto fue confirmado.
Por otra parte, Lucas, uno de los hijos de Román, contó que el domingo anterior "sopló viento desde el sur, que te impulsa para el norte", por lo que reveló que una de las teorías que se bajaran es que "pueden estar por el Partido de la Costa, más por el lado de San Clemente del Tuyú”.
También se estima que el kayak podría estar cerca de Uruguay, a unos 200 kilómetros al sur de Punta del Este, según reveló Pablo, otro hijo de Ramón, a las autoridades municipales. Al joven se lo indicaron conocidos pesqueros. Desde la Municipalidad de Pinamar se comunicaron con la Dirección Nacional de Emergencias de Uruguay para transmitir la alerta.
En este marco, el kayakista profesional Patricio Redman analizó que Raimann y Román se metieron al mar mientras regía una "alerta de tormenta" con "un kayak doble sit on top abiertos, que son muy vulnerables al viento, sobre todo si llega desde tierra hacia al mar", y remarcó: "el mar te puede llevar y no hay forma de regresar por más que seas un deportista".
En diálogo con Página|12, el profesional afirmó: "El (kayak) sit on top se diseñó para Miami, no sirven para aguas abiertas porque tienen mucho rozamiento. Con viento y oleaje no avanzan y te lleva como una balsa mar adentro, que es lo que seguramente pasó. Suele volcarse y quedan en el agua. Si no llevan un cabo para agarrarla, quizá la perdieron".