“El regreso de Twin Peaks terminó con un grito existencial de angustia, la voz de Laura Palmer resonando en el vacío de un purgatorio incierto pero potencialmente eterno, fuera del tiempo. Pues, ¿a quién no le gustaría que esa sensación estuviera enlatada y en formato bebible?”, se interroga el sitio geek AV Club, no sin suponer que al mismísimo David Lynch seguramente le encantaría. Evidentemente, a juzgar por las pruebas. Y es que el realizador acaba de lanzar su propia línea de cervezas, inspirada –como no podía ser de otro modo– en la susodicha serie de culto, invitando a experimentar una realidad muy, muy diferente, ingesta etílica mediante. Creada en orgánica colaboración con la reputada cervecería artesanal Mikkeller (de Dinamarca, aunque con sedes en Gran Bretaña, Estados Unidos, etcétera), incluye la novedad tres variantes de birras, amén de satisfacer todas las predilecciones: está la Log Lady Lager, la Red Room Ale, y la Damn Good Coffee Stout. “Lynch estuvo completamente involucrado en todos los aspectos del proceso de elaboración, inclusive en los conceptos iniciales, los nombres de los productos, el análisis sensorial y la degustación”, subraya el comunicado oficial de la empresa nórdica, y explica cómo el director de arte de la compañía, Keith Shore, y el buen David conspiraron armónicamente para dar con el packaging final: latas con ilustraciones que evocan escenas de la tira, en colores tomados de la serie de televisión. Por lo demás, aclaran que la Damn Good Coffee Stout ha sido producida a partir de los granos de la propia marca de café de Lynch, léase David Lynch Signature Cup Organic House Blend. Y que tras su presentación en sociedad la pasada semana en el Festival of Disruption –otra iniciativa lyncheana–, podrán obtenerse las latitas de cerveza en sus sucursales de Los Ángeles, Oakland, San Diego y San Francisco. Al menos, durante los próximos meses. Se trata, después de todo, de una edición limitada.