A 24 horas de la primera protesta nacional contra la gestión de Javier Milei, los cruces entre el gobierno y los dirigentes sindicales suben de temperatura. Pablo Moyano le contestó a Patricia Bullrich, asegurando que en la marcha al Congreso de mañana, destinada a amplificar el paro nacional, "va a ser incontrolable por la cantidad de laburantes movilizados". Así, el dirigente de la CGT le advirtió a la Casa Rosada que a los trabajadores "nadie" los "corre con multas ni con milicos". Luego, el presidente Javier Milei aseguró que quienes convocan a la protesta defienden “un modelo populista” que “generó un país con un 50 por ciento de pobres y un 10 por ciento de indigentes”. Desde las dos CTA le contestaron a Milei que su Ley Ómnibus repite las recetas fracasadas de la dictadura, el menemismo y la administración Macri.
Hubo cruces por el operativo de seguridad y por el tema de fondo, la desregulación de la economía y la quita de derechos laborales y de protecciones frente al mercado impulsadas por el Gobierno. Sobre el protocolo antipiquetes, Moyano planteó que es un intento de la ministra de Seguridad para "demostrar autoridad" frente a "sus mandantes, las corporaciones que hoy gobiernan el país".
"Bullrich va a montar el show que nos tiene acostumbrados. Va a querer bajar a la gente de los puentes, de las autopistas", adelantó Moyano sobre lo que puede suceder mañana e ironizó: "¿Cómo vamos a respetar el protocolo? ¿Me llevo a upa a los 40 mil camioneros que voy a movilizar? ¿O en fila india? Es imposible".
El dirigente de la CGT agregó: "No somos orcos ni grupos paramilitares. Queremos expresar el descontento con estas medidas. Nosotros le garantizamos a la gente que va a ser una movilización en paz".
Las respuestas a Milei
El Presidente fue consultado sobre la huelga en una entrevista. "El paro va a mostrar que hay dos Argentinas: una que se quiere quedar en el atraso, en el pasado, en la decadencia, en este país que es el más rico del mundo y es el 140, en un país que en lugar de recibir a gente de todo el mundo se convirtió en un mundo donde tenemos 50 por ciento de pobres, 10 por ciento de indigentes. ¿Queremos ese modelo o queremos el modelo que nos pone en el camino de ser un país desarrollado que es el que nosotros proponemos?”, se preguntó Milei en un reportaje que concedió a Ari Paluch.
Sus consideraciones fueron refutadas desde las dos CTA. El diputado Hugo Yasky planteó que “Milei se autopercibe como un líder mesiánico que va a hacer que la Argentina vuelva a ser la de 1905, un país en el que los pobres no tenían ningún derecho, en el que eran anónimos y se padecía el hambre en silencio, agachando la cabeza, y en el que los pocos que salían a luchar eran reprimidos ferozmente. Ese es el país que Milei piensa que tiene que refundar, por eso odia al populismo, es decir odia al peronismo”.
Para el referente de la CTA, el Presidente “va a ser testigo dentro de pocas horas de la respuesta que los trabajadores de la Argentina le dan a quienes como él quieren llevarnos otra vez a la picadora del hambre y la pérdida de derechos, la que tantas veces pusieron a funcionar los que él reconoce como los grandes líderes de este país: Mauricio Macri, José Alfredo Martínez de Hoz, Domingo Cavallo, que ya fueron responsables de otros fracasos, como lo va a ser nuevamente él. Lamentablemente el precio del hambre, el sufrimiento, la penuria, la van a pagar otros. Milei va a pasar a la historia como otro más de los que quisieron llevarse por delante a la Argentina y chocaron contra los que tienen dignidad para defender sus derechos”.
También replicó a Milei el titular de la Asociación de Trabajadores del Estado, Rodolfo Aguiar. “El Presidente se equivoca cuando dice que el paro va a mostrar dos Argentinas. Argentina hay una sola, lo que va a mostrar con claridad la huelga es que hay dos modelos de país. Si algo va a empezar a ocurrir el 24 de enero es que en las calles se empieza a plebiscitar el programa económico que pretende aplicar el gobierno nacional”.
“No sólo vamos a ser los trabajadores y jubilados, sino una enorme mayoría los que vamos a rechazar este ajuste potente y regresivo, que se impulsa desde Buenos Aires pero que rápidamente llega a las provincias y a todos los municipios”.