El director de Radio Nacional Córdoba, Orestes Lucero, interrumpió ayer la programación habitual de la señal para criticar al aire una entrevista que le acababan de hacer los periodistas Fabiana Bringas y Nicolás Fassi a María Isabel Huala, madre del lonko y referente de la comunidad mapuche Facundo Jones Huala. De manera agresiva, el director descalificó el reportaje y acusó a la producción y conducción del programa de hacer “periodismo militante” con respecto a un “caso político” como calificó el de la desaparición forzada de Santiago Maldonado. Los trabajadores de Radio Nacional, el colectivo Ni Una Menos, la Facultad de Ciencias de la Comunicación y el Círculo de la Prensa de Córdoba, entre otras organizaciones, repudiaron la actitud de Lucero. Desde la dirección de la emisora, en cambio, lo respaldaron.
“Me resulta vergonzoso que una persona cuya identidad mucho no conozco critique e insulte a dos gobiernos, el argentino y el chileno, que mal que le pese a usted, a la señora Isabel, o a quien escuche, fue elegido democráticamente”, afirmó el director de la radio, quien agregó: “No puedo entender por qué desde la producción o usted desde la conducción da entidad, en un día preelectoral, sobre un acontecimiento que es evidentemente político, a la madre de Jones Huala”.
Lucero cayó en una contradicción al decir que en la Radio Nacional “deben escucharse todas las partes”, pero si no “encuentran a la ministra (de Seguridad), no sacan una campana, si no están siendo tendencioso”.
“La línea editorial de Radio Nacional, es la falta de línea, no hay línea. Sólo los hechos debidamente cronicados con entidades y con representantes que podamos saber exactamente qué entidad tienen para hablar. Lo que acabamos de ver es un hecho tendencioso, subjetivo, descalificador, inadmisible”, siguió el director, quien además calificó a Jones Huala como un delincuente común. Antes de cortar, Lucero hizo una última advertencia: “A los gobiernos que sean elegidos legítimamente, si estamos en una democracia, eviten descalificaciones de cualquiera, porque mal que les pase son democráticos”.
La directora de la emisora, Ana Gerschenson, como así también su subdirector, Pablo Ciarlero, avalaron al director de Córdoba. La primera acusó de censura a la gestión anterior y dijo que “Ahora se escuchan todas las voces, la de la madre de ‘Hualas’ (sic), pero también la del director”. Ciarlero, por su parte, manifestó su “solidaridad con Orestes Lucero”. “Censura es omitir una opinión, no emitir la propia”, escribió en Twitter.
El respaldo de las máximas autoridades de la radio contrastó con el repudio de los trabajadores y de distintas organizaciones se también expresaron su apoyo a los periodistas.