En medio de una escalada inflacionaria sin frenos, el precio del pan hará sentir un nuevo golpe al bolsillo. Así lo informaron los centros panaderiles de la Provincia de Buenos Aires, desde donde confirmaron que se hizo una remarcación del 20 por ciento.
Entrevistado por AM750, Martín Pinto, presidente del Centro de Industriales Panaderos de la ciudad bonaerense de Merlo, aseguró que, con esta suba, el kilo de pan se vende con un precio base de $1.800.
Pero, lejos de quedar acá, ya prevén una nueva suba para febrero. “A nosotros nos da para un aumento de un 36 por ciento, pero decidimos hacerlo en dos tramos. Hacerlo un 20 por ciento ahora y rogar que no aumente nada y en 20 días aumentar el otro porcentaje”.
“Nosotros, las pequeñas pymes familiares, siempre corremos detrás de la inflación. Tenemos que tratar de no fundirnos. Desde el 10 de diciembre, las cosas nunca dejaron de aumentar”, aseguró sobre el impacto de las políticas neoliberales en los precios de los insumos y servicios.
Y en este punto, recordó: “Cerramos paritarias en diciembre con un acuerdo de tres cuotas de casi un 100 por ciento de aumento. Amén de todo eso, nos vienen aumentando todo. Nos dolarizaron todo. No sólo los insumos, sino también el mantenimiento de las panaderías”.
El propio Pinto aseguró que esto ya se sintió con fuerza en el sector, donde “ya cerraron 16 panaderías en Merlo, 36 en la provincia y 120 en el país en 30 días”.
Pero con un agravante: “No hay a quién reclamarle. A nosotros, a base de insistir, de enojarnos, el Gobierno anterior nos hizo una mesa del pan. Teníamos quien haga de mediador entre las pymes y los grandes empresarios. Y nos levantaban el teléfono y escuchaban. Hoy no tenemos a nadie del otro lado”.
