El presidente de la Cámara de la Industria Aceitera y del Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), Gustavo Idígoras, celebró el anuncio del ministro de Economía, Luis Caputo, sobre la decisión del Gobierno de retirar la propuesta de suba de retenciones del proyecto de Ley Ómnibus que se debate en la Cámara de Diputados.
"La decisión del ministro Caputo es muy positiva. Como agroindustria exportadora valoramos el enorme esfuerzo que está haciendo el Gobierno y la capacidad que ha tenido de revisar esta medida, que claramente tenía un altísimo nivel de rechazo de todos los sectores exportadores y también de muchas provincias y legisladores", señaló Idígoras tras conocerse la medida.
"Este es el camino correcto y hay que trabajar apoyando al Gobierno para avanzar en un plan económico que permita el crecimiento con un fuerte desarrollo exportador. Así que desde Ciara-CEC felicitamos al Gobierno por esta revisión de la medida", agregó el dirigente empresario en un contacto de prensa.
La decisión de Caputo de retirar el capítulo fiscal del proyecto de Ley Ómnibus, en la cual estaba contemplada una suba de retenciones, se produjo tras el rechazo de varios legisladores llamados "dialoguistas" y de gobernadores a esas iniciativas.
En lo que respecta de manera especifica al tema retenciones, la propuesta comprendía el aumento en los derechos de exportación para el conjunto de los complejos exportadores al 15 por ciento, a excepción de 36 producciones de las economías regionales. De esta manera, el trigo y el maíz iban a pasar a tributar dos puntos más de retenciones que en la actualidad , mientras la carne tendría seis puntos más y el girasol ocho puntos por encima de la alícuota actual.
Según los cálculos del Gobierno, subiendo esta alícuota, recaudaría el equivalente al 0,5 puntos del PBI.
Además de perder ingresos fiscales por la anulación de la alícuota de los derechos de exportación, la economía también tendrá menos aporte de divisas del campo por la baja de los precios internacionales de los productos exportables. El precio de la soja volvió a cerrar este viernes con pérdidas en el mercado de Chicago, presionado por las buenas expectativas productivas en Argentina, mientras los cereales también concluyeron la operatoria con signo negativo en sus cotizaciones.
El contrato de marzo de la oleaginosa cayó 1,12 por ciento (5,05 dólares) hasta los 444,32 dólares la tonelada, a la vez que a mayo hizo lo propio por 1,13 por ciento (5,14 dólares) para concluir la jornada a 446,90 dólares la tonelada.
Los fundamentos de la baja radicaron en las buenas perspectivas productivas de Argentina tras el aumento en la estimación de producción de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires (BCBA) hasta las 52,5 millones de toneladas, previsión que se ubicó incluso por encima de las 52 millones de toneladas proyectadas por la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR).
"Lo que pasa en la Argentina tiene un correlato muy fuerte sobre el mercado, dado que los operadores todavía consideran que su producción será la que más compensará las pérdidas que se registrarán en Brasil", señalaron desde la corredora Granar. La harina acompañó la tendencia bajista del poroto, con una caída del 2,56 por ciento (10,14 dólares) hasta los 384,70 dólares la tonelada.
