El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó a la baja la proyección de la economía de Argentina para este año y ahora estima que caerá un 2,8 por ciento, para luego crecer un 5 por ciento en 2025, según el informe de Perspectivas Económicas publicado este martes por el organismo con sede en Washington. En la publicación de octubre, el organismo multilateral había pronosticado un crecimiento de 2,8 por ciento para este año. Este miércoles se reúne el directorio de la entidad para analizar el acuerdo técnico alcanzado con Argentina.
El informe, conocido como WEO por sus siglas en inglés, remarca que la revisión a la baja se da en “el contexto de un ajuste significativo de la política económica para restablecer la estabilidad macroeconómica”.
Con esta caída, el país será el que más retrocederá en 2024 entre los 30 Estados seleccionados por el Fondo para sus proyecciones globales, aunque en 2025 será el tercero que más crecerá, detrás de India y Kazakstán.
En cuanto a 2023, el organismo proyecta que la economía argentina cayó un 1,1 por ciento, una mejoría respecto al descenso de 2,5 por ciento que el Fondo estimaba en su informe de octubre.
"Estamos viendo un crecimiento negativo para Argentina en 2024 de 2,8 por ciento, lo cual es un gran ajuste a la baja de 5,6 puntos comparado con las proyecciones de octubre. Esperamos que el crecimiento volverá en 2025 y será de cerca del 5 por ciento, así que habrá un fuerte rebote, aunque dependerá de la consolidación fiscal que empieza a haber en el país bajo la nueva administración", explicó en conferencia de prensa el economista en jefe y director del departamento de investigación del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas.
Respecto de la inflación, el FMI no precisó las proyecciones para el país, pero afirmó que habrá una suba en el corto plazo por el “realineamiento de los precios relativos y la eliminación de controles de precios, depreciación de la moneda y el pasaje hacia los precios”, a lo que Gourinchas agregó el proceso de "remoción de algunos subsidios".
El director del FMI estimó que la inflación mensual volverá a ser de un solo digito mensual para mediados de este año y que finalizará 2024 con una suba acumulada de aproximadamente 150 por ciento, por debajo del 211 por ciento acumulado en 2023.
"Lo que tenemos en Argentina es que hubo condiciones muy deterioradas con un rápido aumento de la oferta monetaria para financiar el gasto gubernamental y ahora eso está motorizando el proceso inflacionario", indicó el economista.
Asimismo, destacó que el Gobierno "está tratando de realizar una consolidación fiscal muy significativa para llegar a un 2 por ciento de superávit primario para este año, lo cual sería un ajuste fiscal muy grande de cerca del 5 por ciento del PBI". No obstante, aclaró que el mayor riesgo es ver si "esa consolidación fiscal puede ser implementada y que sea durable en el tiempo".
En la región, el FMI proyecta un crecimiento promedio del 1,9 por ciento, con un avance de 1,7 por ciento en Brasil (2 puntos porcentuales más que en la anterior estimación) y 1,5 por ciento en México (0,6 puntos más).
El acuerdo
El Directorio del FMI analizará este miércoles el acuerdo técnico alcanzado con la Argentina con parte de la séptima revisión del Programa de Facilidades Extendidas. La aprobación del Directorio permitirá liberar de manera inmediata el desembolso de parte del organismo de 4.700 millones de dólares, que serán utilizados por la Argentina para el pago de los compromisos de diciembre, enero y abril próximo.
El 10 de enero pasado, el ministro de Economía, Luís Caputo, anunció que se logró "reflotar el Acuerdo de Facilidades Ampliadas, que estaba caído, con el Fondo Monetario Internacional". El equipo técnico del organismo que visitó el país, encabezado por Luis Cubeddu y Ashvin Ahuja, había observado que el programa original "se desvió gravemente de su rumbo: se incumplieron las metas de déficit fiscal primario y de deudas internas para finales de septiembre, y datos preliminares sugieren que las metas de fin de año se incumplieron incluso por un margen mayor". Los desvíos señalados hacían referencia al déficit fiscal de 1,9 por ciento del PBI comprometido para el 2023 por la administración de Alberto Fernández, que finalmente cerró con un resultado negativo del 2,7 por ciento. A eso se sumó el compromiso de recuperar reservas por parte del Banco Central, lo cual no ocurrió debido a que el organismo finalizó con una pérdida de alrededor de 10.000 millones de dólares, debido al impacto de la sequía en las exportaciones del sector agroindustrial.
Pese a ello, se alcanzó un acuerdo con la nueva gestión. La vocera del FMI, Julie Kozack, a través de un comunicado de prensa, destacó que la Argentina comenzó a aplicar "un plan de estabilización ambicioso" y que el organismo confiaba en que el gobierno de Javier Milei siga generando apoyo político.
El jefe de Gabinete, Nicolás Posse, viajó el lunes por la noche a Washington, Estados Unidos, con el objetivo de fortalecer la relación con ese país. Su agenda prevé una reunión con la subdirectora del FMI, Gita Gopinath, y con el secretario Adjunto del Tesoro de EE.UU., Michael Kaplan y el subsecretario de Asuntos Internacionales, Jay Shambaugh.