Evo Morales y Dilma Rousseff se pronunciaron sobre la muerte de Santiago Maldonado. El presidente de Bolivia envió condolencias y pidió que se esclarezca el “cobarde y condenable asesinato”. La ex presidenta de Brasil reivindicó al “activista de derechos humanos”. “Todo indica que fue detenido por una policía subordinada al gobierno”, recordó, y advirtió que su muerte “indigna al continente sudamericano, que no acepta el terrorismo de Estado ni los ataques a los derechos humanos”.