Los ocho militares mexicanos investigados por el caso Ayotzinapa que estaban en libertad condicional desde la semana pasada, tras una cuestionada decisión de un tribunal del distrito del Estado de México, fueron detenidos de nuevo en las últimas horas tras emitirse nuevas órdenes de arresto.

Un juez federal entregó a la Fiscalía las ocho órdenes de aprehensión por "delincuencia organizada" contra los miembros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena). Tras ello, el abogado defensor Alejandro Robledo informó que tres de ellos fueron detenidos y los otros cinco militares se entregaron a las autoridades, justo antes del inicio de una audiencia en el que se iba a tratar su libertad condicional.

Por su parte, el abogado de los familiares de los 43 estudiantes, Vidulfo Rosales, negó haber sido notificado de la detención de los militares. "Sabemos que es por delito de delincuencia organizada y no por la desaparición forzada, pero de manera oficial no se nos ha notificado nada", explicó.

Rosales anunció que esperarán a que avance la investigación para tomar una postura respecto a las detenciones: "Podría ser buena señal, pero vamos a esperar a que nos informen las autoridades".

La desaparición de los 43 estudiantes

Los 43 estudiantes de la escuela rural para formación de maestros de Ayotzinapa desaparecieron el 26 de septiembre de 2014 después de ser perseguidos a tiros y detenidos por policías, que los entregaron a un grupo criminal por causas no esclarecidas en lo que muchos consideran un claro caso de desaparición forzosa por parte de las fuerzas mexicanas.

La hipótesis oficial de que fueron asesinados e incinerados en el basurero de Cocula fue refutada por los expertos, que consideran que no existen evidencias científicas para sostenerlo. A esto se suma el informe de la llamada Comisión de la Verdad y el Acceso a la Justicia, que apunta a que la desaparición de los estudiantes fue un crimen de Estado.