La aprobación en general de la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados, generó la inmediata celebración del oficialismo y sus aliados, que la destacaron como "una herramienta para salir de la decadencia de décadas". Mientras tanto, legisladores y dirigentes opositores cuestionaron la megaley que desregula economía y señalaron que se trata de "un golpe terrible" para "quienes creen en la democracia y la justicia social".
Tras haber reclamado durante la tarde que Diputados cerrara el debate y pasara a votar -lo que derivó en cuestionamientos por la injerencia del Poder Ejecutivo sobre el Legislativo-, Javier Milei festejó el resultado a través de las redes sociales, con un escueto "viva la libertad, carajo". El área de comunicación del Ejecutivo fue un poco más explícita: "La Oficina del Presidente celebra el voto positivo de los señores diputados que aprobaron en general la Ley de "Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos" y agradece especialmente la colaboración de los señores diputados y jefes de sus respectivos bloques, Cristian Ritondo, Miguel Ángel Pichetto y Rodrigo de Loredo, quienes, a pesar de nuestras diferencias, han contribuido para que la ley avance".
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, responsable del operativo represivo montado por tercer día consecutivo en torno al Congreso, también destacó a la megaley como "una herramienta para salir de la decadencia de décadas".
Desde la oposición dialoguista, el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, destacó que "con el apoyo mayoritario de un sector de la oposición, el gobierno nacional logró dar un primer paso y el Presidente dio un fuerte mensaje a la sociedad, a los mercados y al mundo en la búsqueda de transformar un país devastado por el kirchnerismo". También desde las filas del PRO, la diputada María Eugenia Vidal destacó: "Hemos avanzado con un proyecto indispensable para recuperar el futuro que el kirchnerismo le ha robado a los argentinos".
"Esta jornada no conforma a nadie -apuntó el diputado de UxP Leandro Santoro-. La ley salió y eso es malo para la Argentina, pero de una manera que el presidente Javier Milei no lo puede festejar y sus aliados tuvieron dificultades enormes para explicar por qué votaron a favor".
Para el líder del Frente Patria Grande Juan Grabois, la aprobación "es un golpe terrible para quienes creemos en la democracia, justicia social, en una Argentina de paz y dignidad. Se votaron las facultades delegadas, la destrucción del ambiente, la entrega del control legislativo sobre el endeudamiento y no se derogó el DNU".
El diputado de UxP y exgobernador de Entre Ríos Gustavo Bordet explicó que rechazó la iniciativa del gobierno nacional porque "más allá de las dudosas modificaciones que se hicieron, no va a contribuir en nada para mejorar la calidad de vida de los argentinos".
Desde el Frente de Izquierda, la diputada Myriam Bregman también puso la mira en la sesión convocada para el martes que viene: "Falta la discusión en particular de una ley sumamente perjudicial para decenas de trabajadores en nuestro país".