La Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional (Correpi) informó que 20 personas fueron detenidas tras la represión que se registró durante la noche del viernes en Plaza Congreso contra manifestantes que protestaban por la media sanción que el proyecto "Bases" obtuvo por parte de la Cámara baja. "Se acaba de disponer la primera soltura", informó en X la abogada María Del Carmen Verdú, de la Correpi.

"El que las hace las paga", amenazó este mediodía Bullrich desde su cuenta de X y atacó especialmente a "dos chilenos partícipes del desastre", diciendo que pedirá su "expulsión". Uno de ellos es el fotógrafo Pablo Sabando Aburto, chileno, de 35 años, con seis de residencia en el país, quien fue detenido.

En tanto, la Policía de la Ciudad de Buenos Aires confirmó que 14 personas permanecen detenidas. Informó que los detenidos son 12 hombres, un menor de edad y una mujer, quienes fueron puestos a disposición de la Justicia. Indicó que "cinco de ellos, cuatro mayores y un menor de edad, fueron apresados cuando estaban vandalizando una sucursal bancaria en Rivadavia al 1300 y por quemar contenedores".

La versión policial añade que siete hombres y una mujer fueron apresados en la avenida Callao al 300 por arrojar botellas y otros objetos a la Policía Federal, que se había desplegado en la zona de Congreso como parte de un fuerte dispositivo en el que participaron otras fuerzas de seguridad.

El viernes por la noche se confirmaron las detenciones de dos fotógrafos: Aburto y Sergio Luciano RIvotta, de 43. Ambos son trabajadores de prensa vinculados a la Red por la Defensa de los Derechos Humanos y la Democracia.

Verdú contó a PáginaI12 que de los 20 detenidos, "tres están en comisarías de la Policía de la Ciudad y el resto en la Superintendencia de Investigaciones de la Policía Federal". Precisó que "se están haciendo ahora las audiencias imputativas con la fiscalía", tras las cuales los detenidos serían puestos en libertad. 

Gases y bastonazos

Los alrededores del Congreso fueron el viernes, por tercera jornada consecutiva, el escenario de la violencia policial contra manifestantes que se oponen a la sanción de la denominada Ley Bases que impulsa el Gobierno. Nuevamente, fue impactante ver cómo los uniformados atacaban a la prensa, impidiéndole acercarse para tomar imágenes de los hechos.

Granadas de gas lacrimógeno, gas pimienta y bastonazos fueron usados por los agentes para dispersar a los manifestantes, quienes respondieron con el lanzamiento de piedras y botellas. Efectivos de las fuerzas de Seguridad cargaron contra manifestantes y los obligaron a retirarse de las calles adyacentes al Parlamento, en su empeño por hacer cumplir el protocolo de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich. 

Los militantes, en su mayoría de agrupaciones izquierdistas, organizaciones sindicales o de movimientos sociales, chocaron con los miembros de la Gendarmería, la Policía Federal Argentina (PFA) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) que tomaron parte en el operativo.

La provocación de Bullrich

Por su parte, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, respaldó el accionar cumplido por las fuerzas de seguridad en Plaza Congreso, como lo hizo en las dos jornadas anteriores con un mensaje en las redes sociales.

"Presentaremos una denuncia penal y pediremos la identificación de todos los que quemaron bienes públicos tirando piedras, destruyendo todo al pasar y atacando a funcionarios policiales", señaló Bullrich en X en la noche del viernes. En ese sentido, agregó: "Felicito el profesionalismo de las Fuerzas Federales. Las organizaciones deberán pagar los daños causados y los gastos del operativo. El que las hace, las paga".

Pasado el mediodía, la ministra volvió a publicar en la red social. Mencionó que hay 18 detenidos, "más los de Ciudad, por los destrozos". "Casualmente dos chilenos, uno conocido por participar de la destrucción total del país hermano en 2019. ¿Ahora, aquí, haciéndose el fotógrafo mientras incendiaba todo? Vamos a ir a fondo en la causa, investigar a cada uno de los involucrados y pedir la expulsión de los dos chilenos partícipes de este desastre. El que las hace, las paga", amenazó. Así, atacó directamente a Sabando Aburto, uno de los trabajadores de prensa detenido este viernes. 


Por su parte, el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolff, dijo que los detenidos son 12 mayores y un menor, "algunos con antecedentes policiales". En declaraciones radiales, advirtió que habrá "acciones legales" para que "detenidos y organizaciones" paguen los "destrozos". Son, según él, 50 millones de pesos en daños al patrimonio público.

Presentación ante la CIDH

Por su parte, y "debido a la escalada de violencia estatal a la que asistimos en estos días", el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) presentó una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, junto con el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SipreBa), la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (Argra) y el Centro de Profesionales por los Derechos Humanos (Ceprodh). 

"Debido a la gravedad de la situación, y ante la inminencia de nuevas represiones frente a otras protestas, solicitamos ahora el otorgamiento de las medidas cautelares a favor de trabajadores de prensa y abogados defensores de manifestantes individualizadas", dice el escrito del CELS.