Con 144 votos a favor y 109 en contra, la Cámara de Diputados de la Nación aprobó en general la ley ómnibus del presidente Javier Milei. Como se sabe, la iniciativa pasó a un cuarto intermedio hasta el martes, donde se reanudará la discusión artículo por artículo para conocer si logra la media sanción, en un debate que se avizora intenso y que podría extenderse por varios días. De los 19 diputados santafesinos, 11 acompañaron el proyecto, mientras que 8 rechazaron la propuesta. Unión por la Patria y el socialismo manifestaron su oposición a la norma en su conjunto, mientras que desde el PRO acompañaron la iniciativa, aunque manifestarán sus reparos en algunos aspectos puntuales de la ley. En diálogo con Rosario/12, distintos legisladores coincidieron en que el tratamiento fue “desordenado” y cuestionaron que la votación se haga sin conocer el texto final de la normativa.

Diputados dio luz verde para avanzar con la Ley de Bases y Puntos de Partida para la Libertad de los Argentinos, con la que Milei pretende impulsar reformas sustanciales en una multiplicidad de aspectos que van desde cambios en las leyes laborales, hasta privatización de empresas públicas, pasando por una reforma previsional y una serie de facultades delegadas a la figura del presidente, entre otros. No le fue fácil. La norma, que contemplaba más de 600 artículos, terminó reducida a la mitad, y en las calles se generó un clima de tensión que terminó con represión policial los tres días en que se extendió el debate parlamentario.

* En ese marco, los legisladores santafesinos hicieron su aporte. Al voto afirmativo de Romina Diez, Nicolás Mayoraz y Rocía Bonacci, los tres diputados de La Libertad Avanza, se sumaron los legisladores del PRO, Germana Figueroa Casas, José Núñez, Gabriel Chumpitaz, Verónica Razzini, Alejandro Bongiovanni y Luciano Laspina. Mientras que los radicales Mario Barletta y Melina Giorgi, completaron la nómina de diputados que votaron en favor de la ley.

En diálogo con Rosario/12, Núñez calificó al tratamiento legislativo como “desordenado” y cuestionó al oficialismo por su “falta de experiencia” a la hora de lograr consensos con los bloques opositores, para encaminar el proyecto a su aprobación. “Fue un proyecto muy ambicioso donde se olvidaron de separar lo urgente de lo importante”, evaluó. En ese sentido, argumentó que el voto a favor de su espacio se dio luego de que se retiraran del proyecto algunos puntos de la ley que entendían perjudiciales para el país en general y la provincia de Santa Fe en particular.

“Eso no quiere decir que nosotros le damos un cheque en blanco a nadie”, expresó. Y agregó: “El gobierno primero entró con una actitud muy soberbia que no negociaba nada. A nosotros nos calificaron de dialoguistas, pero lo que en realidad queríamos era acompañar, aunque con algunas cosas era imposible. Pero no porque quisiéramos poner palos en la rueda, sino porque queríamos ayudar. Nuestra sugerencia fue acompañar para el bien del país, no de Javier Milei”.

El legislador sostuvo que uno de los puntos en discusión fue el tema retenciones, así como también algunas empresas que figuraban dentro de las que el gobierno tenía intención de privatizar, y que finalmente quedaron fuera del texto de la ley: “Nos escucharon en muchos temas. Creo que hubo una muestra de diálogo, más allá de la pirotecnia verbal que todos los días vemos con el vocero presidencial (Manuel Adorni) y con el mismo presidente. Resta la votación particular, donde todavía hay intenciones de cambiar algunos puntos del texto y dejarlos para más adelante, porque entendemos que no son de urgencia”.

* En tanto, los diputados santafesinos de Unión por la Patria, Germán Martínez, Eduardo Toniolli, Roberto Mirabella, Florencia Carignano, Diego Giuliano y Magalí Mastaler expresaron su rechazo completo a la norma y adelantaron que también darán el debate por el articulado de la ley. En el peronismo, además del rechazo al contenido de la ley, también hubo una crítica constante a las formas en que se llevó adelante el tratamiento en el recinto. Uno de los cuestionamientos que más se escuchó en las exposiciones tuvo que ver con la falta de conocimiento respecto a las modificaciones del dictamen que se estaba votando. “Probablemente el 95% de los que estamos acá sentados ni siquiera sepamos qué es lo que se va a poner a consideración a la hora de votar”, sostuvo Martínez, presidente del bloque de Unión por la Patria, durante el cierre del debate. “Estamos hablando de un oficialismo que no defiende su proyecto, que el proyecto lo defienden los aliados que hoy votan”, agregó.

En una misma línea se pronunció Florencia Carignano en declaraciones a este medio, calificó de “vergonzoso” lo ocurrido durante los tres días de sesión: “El PRO y parte de los radicales acompañaron la ley después de haber sido insultados y degradados por el presidente Milei, que les dijo desde corruptos hasta coimeros. Yo no sé cómo van a hacer muchos de ellos para volver a sus provincias cuando están votando en contra de la destrucción de muchos trabajos, de empresas estatales que son insignias en muchos de sus sectores. Es un comportamiento bastante lamentable y poco digno. Pero después tendrán que explicar o figurar en los libros de historia como los grandes traidores”.

Para la diputada por Santa Fe, uno de los puntos que más genera preocupación pasa por la desregulación del mercado de biocombustibles, que impacta de lleno en diez empresas del sector radicadas en la provincia: “He estado en diálogo permanente con ellos e incluso generamos una reunión en conjunto con todos los legisladores de la provincia para rechazar esto. Espero que todos los que estuvieron ahí mantengan la promesa firme de no votar a favor de la eliminación de las pymes de biodisel, que sería la pérdida de muchos puestos de trabajo y quizás el fin de muchos pueblos de nuestra provincia”.

* En una misma línea se pronunciaron los socialistas Mónica Fein y Esteban Paulón, integrantes del bloque Hacemos Coalición Federal, que incluso lograron firmar un dictamen propio durante el tratamiento en comisiones. El socialismo cuestionó que la votación se haya dado sin el dictamen final y sin contar de manera oficial con ninguno de los cambios efectuados. “Fue muy desprolijo”, consideró Mónica Fein en diálogo con Rosario/12. “Discutimos tres días sobre un dictamen que ha cambiado muchísimo. Nosotros reconocemos que hay una emergencia e incluso propusimos darle algunas atribuciones similares a la que han pedido otros presidentes, pero no un cheque en blanco ni una delegación de poderes que permita tomar decisiones al margen del Congreso de los temas más importantes que tenemos en la Argentina”, señaló.

Respecto a lo que viene, la diputada advirtió un debate intenso en los aspectos particulares de la ley, donde desde el socialismo dejarán explícito su rechazo a la norma, especialmente en lo que refiere a los cambios en cultura, ambiente, privatizaciones y reforma jubilatoria. “También vamos a opinar sobre que se hayan sacado algunos artículos que podrían haber sido mejorados, como el impuesto PAIS que podría haber sido coparticipado. Y queremos insistir en la necesidad de garantizar la salud, la educación y la seguridad”, adelantó.

 

Por último, se refirió al funcionamiento del bloque federal que integran junto a otros espacios provinciales y que tiene como principales referencias a Miguel Ángel Pichetto y Margarita Stolbizer. “Compartimos la idea institucional de que tenemos que funcionar, y que el Congreso no le tiene que dar motivos al Ejecutivo para desligarse de responsabilidades por lo que está pasando, porque más que no tener plata, el gobierno parece no tener un plan. Pero también nos une el federalismo y no vamos a permitir que, para cerrar las cuentas nacionales, se siga produciendo este desangre de las provincias que es donde vive, trabaja y se educa nuestra gente”, finalizó.