Los sindicatos docentes con representación nacional se mantienen en alerta por el tratamiento de la Ley Ómnibus –que elimina los fondos de financiamiento para la educación– mientras en las provincias comienzan a verse conflictos salariales. Falta un mes para el comienzo de las clases y el panorama escolar está complicado. Las gobernaciones anticipan que vienen cortas de recursos económicos para recomponer los sueldos de los maestros, una situación que se agrava porque los aportes que históricamente hacía el gobierno nacional ahora podrían ser recortados.
“Todavía no conocemos cómo quedó el texto de la ley que Diputados aprobó en general, pero de votarse como estaba el borrador original la Ley Ómnibus va a afectar el Fondo Nacional de Incentivo Docente, los fondos para cooperadoras escolares, el Conectar Igualdad, los fondos para capacitación. Los borradores del articulado que circularon esta última semana incluso lo empeoraron y prácticamente anulan la paritaria nacional docente. La verdad es que es grave y nos preocupa mucho”, dijo a Página/12 la titular de Ctera, Sonia Alesso.
La paritaria nacional -con impacto directo en el inicio de la clases, porque fija el sueldo inicial, es decir el piso salarial de los maestros en todo el país- aún no fue convocada, aunque en las conversaciones que mantuvieron en enero el Gobierno y los gremios hubo un compromiso de que la primera reunión se realizaría esta primera semana de febrero.
Además de la Ctera están reclamando los cinco gremios cegetistas de la educación. La Unión Docentes Argentinos (UDA), la Asociación del Magisterio de la Enseñanza Técnica (Amet), la Confederación de Educadores Argentinos (CEA), el Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop) y la Federación de Docentes de Universidades (Fedun) exigieron en conjunto una reunión urgente con el secretario de Educación a nivel nacional, Carlos Torrendell.
Además llamaron a los diputados a “votar negativamente” la megaley de Javier Milei para “no ser cómplices de la destrucción del sistema educativo”.
En las provincias
Como todos los años, las negociaciones paritarias docentes se realizan en dos niveles: mientras que el gobierno nacional debe establecer el salario inicial (piso para todo el país), cada provincia y la Ciudad de Buenos Aires realizan al mismo tiempo las paritarias locales, que definen el resto de la escala salarial y las condiciones de trabajo.
El panorama en los distritos es difícil, hay provincias que todavía no llamaron para iniciar las negociaciones y las que sí están planteando que no tienen suficientes recursos.
En la provincia de Buenos Aires, el titular de Educación, Alberto Sileoni, anticipó que existe “una amenaza clara de que algunos fondos que vienen de Nación puedan discontinuarse y eso es un peligro”. El director general de Cultura y Educación de Axel Kicillof agregó que a pesar de la buena voluntad de la gobernación -que mantiene una paritaria abierta todo el año-, “existe una complejidad nueva. Los dos primeros años de gobierno tuvimos otra complejidad, que tuvo que ver con la pandemia. Ahora es una complejidad política. Está clara la vocación de la provincia de que haya un Estado presente, buenos salarios que acompañen el ritmo inflacionario. Si después de 4 años en los que empezábamos las clases con normalidad, en este no podemos, no será porque cambió la voluntad del gobierno de la provincia sino porque cambió el contexto nacional. Estamos empezando a decirlo”.
¿Qué pasa en los otros distritos “grandes”, los de mayor número de escuelas? En Córdoba, el gobernador Martín Llaryora no tiene acuerdo con los maestros. La Unión de Educadores de la Provincia (UEPC) le reclama un último tramo de recomposición salarial del 2023 y que se inicien las conversaciones paritarias de 2024.
Roberto Cristalli, titular del gremio cordobés de la Ctera, habló además de las dificultades que vienen de la Nación, con la Ley Ómnibus: “Le decimos al gobernador que acaba de mostrar apoyo a la gobernabilidad de Milei, que se prepare en la provincia de Córdoba”, porque si el Congreso aprueba el capítulo educativo de la ley o “si pretende avanzar en una reforma que no nos garantice estabilidad laboral, salarios dignos, capacitación en servicios, no va a haber reforma en Córdoba. No va a haber reforma en Córdoba sin el consenso de los docentes”.
En Entre Ríos los cuatro gremios docentes de la provincia fueron convocados para iniciar este lunes la paritaria local. En Santa Fe hay negociaciones en curso: el gobernador Maximiliano Pullaro reconoció a los gremios una deuda de 36,4 por ciento de actualización por inflación para cerrar la paritaria de 2023, de la que ya pagó un 14 por ciento. Así, despejó el camino para las conversaciones que seguirán en la semana, aunque los gremios anticipan que si en febrero la deuda no es cancelada, tomarían medidas de fuerza.