En uno de los más brutales golpes al bolsillo de los sectores humildes, el gobierno de Javier Milei dispuso, desde este martes, el aumento del boleto de colectivo desde los 77 pesos actuales a 270 pesos. Es decir, un 251 por ciento. El pasaje de tren pasa a 130 pesos con aumentos que oscilan entre el 247 y el 169 por ciento, según el recorrido. El argumento, como se sabe, es el equilibrio fiscal y reducir los subsidios del estado, pero los transportes están subsidiados en el mundo entero porque, justamente, se impulsa el uso del transporte público por razones de defensa del medio ambiente y porque ayuda a los sectores de menores recursos.
Para concretar el golpe, la Secretaría de Transporte utilizó una maniobra judicial. El juez Ernesto Kreplak había anulado la audiencia pública en la que se trató el aumento porque se hizo a través de un chat, no de manera presencial. Sin embargo, el gobierno consideró que la apelación suspendía la cautelar dictada por el magistrado y con esa jugarreta impuso el aumento. La última palabra la tendrá la Cámara Federal de La Plata, que podría resolver esta semana. Mientras tanto, el incremento rige.
Llovido sobre mojado
A la administración Milei le importaron poco los demoledores datos del fin de semana sobre la caída en las ventas de todos los rubros, incluyendo un 40 por ciento en el caso de las farmacias. A esa situación de por sí catastrófica, la Secretaría de Transporte le agregó el tarifario que rige desde este martes, con el mínimo del boleto en 270 pesos para los trayectos que van de cero a tres kilómetros. Los recorridos más largos costarán 370 pesos. En los trenes, la mínima estará en 130 pesos y la tarifa puede subir hasta los 208 pesos. Para quienes toman dos colectivos o un tren y un colectivo, ida y vuelta, significa una cifra cercana o superior a 10.000 pesos y la cifra para una familia trepa a 40.000 pesos. Entre los que no tienen trabajo, el costo del transporte es un obstáculo casi insalvable para salir e intentar conseguir empleo.
Maniobra judicial
Como la ley establece que antes de dictar cualquier aumento en las tarifas es obligatorio convocar a una audiencia pública, el gobierno recurrió a una trampa: convocó la audiencia, pero de manera remota. O sea, a través de la web y el que quisiera verter una opinión, que lo hiciera en una especie de chat. La administración Milei argumenta que opinaron 245 personas, el doble que en la oportunidad anterior. Como se ve, 245 en el universo de usuarios de transporte es la nada misma.
El intendente de Esteban Echeverría, Fernando Gray, se presentó a la justicia y cuestionó el método. El juez Ernesto Kreplak aceptó el planteo porque consideró que hay muchísimos usuarios que no tienen acceso a los canales informáticos y consideró que lo correcto era hacer la audiencia de manera presencial. Por lo tanto, dictó una medida cautelar impidiendo el aumento del transporte hasta tanto la audiencia se hiciera como corresponde.
El gobierno decidió apelar lo resuelto por el magistrado de La Plata. Kreplak aceptó la apelación, pero ocurrió que en su escrito no especificó que mientras tanto seguía rigiendo la cautelar, o sea no podría haber aumento. El asunto es elemental: ningún juez suspende una medida —en éste caso un aumento—, para luego conceder una apelación y anular provisoriamente lo que él mismo decidió. Pero el gobierno aprovechó la imprecisión, para pegar el golpe.
En un comunicado emitido al anochecer, Gray denunció al Estado Nacional por incumplir el fallo de la justicia federal. “El juez le ordenó al Estado Nacional adoptar medidas tendientes a garantizar los derechos de los usuarios readecuando un procedimiento de participación ciudadana en audiencia pública según lo establecido por las normas. El Estado no hizo una nueva convocatoria, esperó el plazo y formuló el anuncio del aumento. Nos presentaremos (este martes) en la justicia para denunciar al Estado Nacional por incumplir el fallo y que se tomen las medidas para evitar este nuevo atropello”, redondeó el mandatario de Esteban Echeverría.
La situación judicial queda ahora en manos de la Cámara Federal de La Plata, porque es la que va a tratar la apelación. Las versiones indican que lo haría esta semana.
*La Cámara puede convalidar la audiencia que hizo el Estado con lo cual quedarían confirmados también los aumentos.
*Pero también podría darle la razón al juez Kreplak, considerando que la audiencia fue nula. En ese caso, anularía los aumentos.
Si la resolución fuera ésta última, el Estado Nacional debería convocar a una nueva audiencia, presencial, y como lo que manifiestan los ciudadanos no es vinculante, terminaría estableciendo los aumentos de todas maneras. ¿Es igual? No, en el proceso de convocar a la nueva audiencia pasarían varias semanas. Lo más probable es que el aumento recién rija en marzo. No es poco.
El transporte y las encuestas
Durante el fin de semana se conoció la opinión de numerosos encuestadores que detallaron la fuerte caída en la imagen de Javier Milei, cuando están por cumplirse apenas dos meses desde su asunción. Pero además de la baja en las opiniones positivas, el 30 por ciento de los consultados dijo que no llega a fin de mes y un 50 por ciento que llega con muchas dificultades. Para ésta última franja, el aumento en el transporte es un mazazo, que se suma a todos los demás incrementos. Si una parte de la población ya tuvo que renunciar a los medicamentos, la suba en el colectivo y el tren los pone en una situación todavía más dramática.