“Cocinamos todos los días del año, al mediodía, para ciento cincuenta personas. Desde octubre nos empezó a llegar más gente; ellos hacen fila igual, aunque sepan que no alcanza para todos. A veces la gente se enoja y nos insulta, o hay peleas sobre quién llegó primero”, cuenta Jovanna. Es una de las cocineras que este miércoles manifestaron frente al edificio de Desarrollo Social para que el gobierno restablezca el envío de alimentos a los comedores comunitarios.
La protesta "Cocineras contra el hambre" arrancó a las 10 de la mañana con una concentración frente al edificio de Belgrano y la 9 de Julio. Al mismo tiempo, en el interior del país , se realizaban otros reclamos frente a delegaciones de Desarrollo Social.
Fue la segunda movilización en pedido de alimentos de la semana a la titular de Capital Humano, Sandra Pettovello. El lunes hubo otro de la UTEP. La nueva manifestación fue convocada por organizaciones sociales de la izquierda “independiente”, en el sentido de que no integran la UTEP ni movilizan con la Unidad Piquetera.
Libres del Sur, la Coordinadora por el Cambio Social, el Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), la Federación Nacional Territorial (FeNaT-CTAA) y el Movimiento Argentina Rebelde fueron algunos de los que participaron de esta movida.
En un comunicado conjunto, las organizaciones hablaron de los motivos de la protesta: "Centenares de coordinadoras y cocineras de comedores populares debieron reducir desde hace tiempo al mínimo o interrumpir su actividad por falta de entregas de alimentos. Ese es el motivo principal de nuestra concentración frente a la cartera que conduce Pettovello".
La seguidilla de reclamos se debe a que desde que asumió, el gobierno de Milei suspendió el envío de insumos a los comedores comunitarios. Las partidas de los programas alimentarios destinados a comedores que tenían asignado el presupuesto como parte del plan nacional Argentina contra el Hambre quedaron sin usar. Las organizaciones sociales plantean que si bien el monto de la Tarjeta Alimentar tuvo aumentos --actualmente es de 44 mil pesos--, no alcanza a cubrir las comidas de todo un mes. Agregan que la tarjeta alcanza a 1 millón 900 mil niños y quienes necesitan alimentos son muchos más.
La estimación es que los comedores llegan diariamente a cuatro millones de personas. En estos días, cortados los envíos de Nación, cocinan con lo que les mandan los intendentes y con las donaciones que consiguen de comercios y vecinos.
"Desde el 10 de diciembre ningún comedor recibe siquiera un paquete de polenta, mientras que cada vez más familias se acercan a comer. A veces tenemos que cerrar antes el comedor, porque nos quedamos sin comida y la fila para recibir algo de comer, es cada vez más larga. Es una emergencia que millones de familias ya no puedan elegir cuántas veces al día pueden comer", agregó en la protesta Carolina Manrique, delegada del Frente de Organizaciones en Lucha (FOL).
La concentración se mantuvo sobre la plazoleta ubicada en la esquina de Moreno y la 9 de Julio. Si bien un cordón de la policía de la Ciudad la rodeó, evitando que las personas cortaran la calle, el operativo policial fue muy menor en relación a la ostentación que la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, desplegó en ocasiones anteriores. Tal vez, por un registro de que el humor social está cambiando.
Para este jueves está anunciada una nueva jornada de reclamo de alimentos para los comedores. El dirigente del Polo Obrero Eduardo Belliboni adelantó que el Frente de Lucha Piquetero realizará una marcha al puente Pueyrredón. La actividad comenzará a las 10 de la mañana en la plaza Alsina de Avellaneda, con las consignas "Milei y Pettovello cierran los comedores populares", y "restitución de los alimentos ya".