El diputado santafesino de Unión por la Patria Diego Giuliano calificó a la quita de subsidios al transporte que dispuso el Gobierno nacional de "cóctel explosivo" y aseguró que "es la gente y no los gobernadores" quienes pagarán el costo.
"Me tocó a mí plantearle a la sociedad que un boleto sin subsidio es desproporcionado para los ingresos de los argentinos, y ahora más aún después de que explotaron los precios en los supermercados, la nafta, en el interés de las tarjetas y los salarios están congelados", señaló el también exministro de Transporte de la Nación en diálogo con AM750.
De un momento a otro, y a dos días de haber dispuesto un aumento del 251% del transporte en el AMBA, el Gobierno nacional comunicó, sin mayores explicaciones, que resolvió "terminar con el congelamiento de las tarifas" en trenes y colectivos.
La medida se conoció después de que el presidente Javier Milei apuntara a los jefes provinciales como los principales responsables del fracaso legislativo de la ley ómnibus. "Es un contexto de venganza", sostuvo Giuliano, y explicó que las regiones más afectadas por la eliminación del Fondo Compensador del Interior son Córdoba, Rosario, Santa Fe, Tucumán y todas las ciudades capitales argentinas.
"Esto no es un problema de un partido político, el transporte tiene subsidios en el mundo entero. Pero no porque se regala sino porque dinamiza la economía, lo social, la cultura y genera impacto ambiental", argumentó el exministro.
En Campana en 750, Giuliano también cuestionó la política de nominalización de la Tarjeta SUBE que lleva adelante el Gobierno y que saturó completamente el sistema de carga y registro presencial y online en los últimos días.
"Lo estábamos haciendo nosotros, pero no con colas interminables de gente preocupadísima porque le aumentan 60% más si no la nominaliza", agregó el legislador santafesino.
Por último, el exfuncionario denunció que la ley ómnibus contenía en su texto la privatización de los ferrocarriles, pero que el objetivo del Gobierno era rematar los terrenos ferroviarios.
"Al querer privatizar la ADIF, que es la Administración de Infraestructura Ferroviaria, quieren vender los terrenos ferroviarios, los activos, las mejores tierras en los pueblos y ciudades de la Argetina (...) La ley ómnibus llevaba a esa desmesura", concluyó.