Gobernadores e intendentes de distintos partidos políticos se unificaron en un rechazo a la decisión del presidente Milei de eliminar los subsidios al transporte público de pasajeros en el interior del país, medida que fue dada a conocer el jueves luego del naufragio de la ley ómnibus en el Congreso.
A su vez, la UTA difundió un comunicado que indica que "frente a un escenario de quita de subsidios luego de varios años de su implementación, no podemos sino manifestar nuestra profunda preocupación por las posibles consecuencias que generará dicha medida sobre el desenvolvimiento de la actividad y su repercusión de la fuente de empleo de los más de 80.000 compañeros trabajadores".
El Fondo Compensandor del Transporte representa la parte mayoritaria de los ingresos de las líneas de colectivos. Sin los fondos de Nación se estima que el boleto debería pasar de unos 340 pesos a 1.100 pesos para sostener el servicio. El viernes además se conoció la suspensión del giro del Fondo de Incentivo Docente, lo cual pone en jaque también la relación de los gobernadores con la comunidad educativa a pocos días del inicio de clases.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, se refirió este viernes a la quita de subsidios al transporte en el interior y aclaró que el Gobierno lo había anunciado en los primeros días de su gestión y que las tarifas son responsabilidad de las provincias y municipios.
Pero lo cierto es que los fondos de Nación financiaban el grueso del sistema y las provincias o municipios no tienen espalda para asumir la diferencia. Las estimaciones indican que con la merma de subsidios los boletos de colectivo en el interior pasarían de 340 a 1.000 o 1.100 pesos. Por su parte, el Gobierno nacional aclaró que mantendría la tarifa social y que los subsidios se canalizarían a través del sistema SUBE, que se sabe está poco difundido en el interior del país.
El jueves, un grupo de 17 intendentes firmaron un comunicado denunciando la delicada situación en que quedan los usuarios del transporte con la decisión del presidente. Informaron además que no descartan acudir a la Justicia tras agotar las instancias políticas, en el documento anticipan que se reunirán la semana que viene en la Ciudad de Buenos Aires para unificar sus reclamos, e invitaron también a los legisladores provinciales y al ministro del Interior, Guillermo Francos, a participar del cónclave que se realizará el jueves en la Casa de Córdoba. Los territorios más afectados son las ciudades de Córdoba, Rosario y Santa Fe que reúnen a la mayor cantidad de pasajeros y líneas de transporte.