Consultoras y analistas del mercado coinciden en que la inflación continuará alrededor de los 20 puntos en febrero, y advirtieron sobre riesgos de que la tendencia se consolide. Se sentirá el impacto de la suba de transporte, que se sumará al arrastre que dejaron los aumentos otorgados a mediados de enero. El alza del precio de los combustibles y el nuevo aumento sobre las cuotas "liberadas" de prepagas, en torno al treinta por ciento, y medicina prepaga, sumarán a este índice. “En este contexto no vemos como el escenario más probable uno de desaceleración rápida de la inflación. Esperamos registros cercanos al 20% mensual también para febrero y marzo. Hoy la caída de la demanda (recesión) y la apertura de importaciones surgen como los principales factores de disciplinamiento de precios”, señalaron desde LCG.

Agregaron que “la coordinación de expectativas debería ser el foco para que la convergencia de precios sea sostenida. La cuestión fiscal, como señal de cambio de régimen, es sólo una parte de este proceso. También se requerirá terminar con el desequilibrio de precios relativos y, posiblemente, de la aplicación de herramientas heterodoxas (como controles de precios y salarios). Todavía no está claro que este combo esté en los planes del Gobierno”, advirtieron.

El cálculo que hacen diversos consultores es que a más tardar en abril habrá una nueva devaluación. Y a eso se le sumarán las subas ya anunciadas en servicios y transporte y también las paritarias, que están aplicándose con una lógica de indexación mensual en torno al 20%. En ese marco, advirtieron, la inercia seguirá jugando fuerte y dificultará la desaceleración inflacionaria.