El exdefensor alemán Andreas Brehme falleció este martes a los 63 años de un paro cardíaco, según comunicó la pareja del autor del gol de penal que le permitió a Alemania consagrarse campeona del mundo en la polémica final de Italia 1990, frente a la Argentina.
"Con profundo dolor comunico en nombre de mi familia que mi compañero Andreas Brehme murió inesperadamente de un paro cardíaco. Pedimos en estos momentos difíciles que se respete nuestra esfera privada", informó la compañera de Brehme, Susanne Shaefer.
El lateral y volante izquierdo oriundo de Hamburgo y de destacada capacidad goleadora jugó tres Mundiales: el de México 1986 (perdió la final con Argentina por 3 a 2), el mencionado Italia '90 y también el de Estados Unidos 1994 (eliminación en cuartos de final), con una marca de 16 partidos y cuatro tantos en la cita máxima del fútbol.
Con su Selección totalizó 86 partidos y 8 goles, incluido el que lo convirtió en ídolo de su país el 8 de julio de 1990 en Roma, Italia. Tras el enternamente discutible cobro del árbitro uruguayo-mexicano Edgardo Codesal a los 84 minutos, Brehme se hizo cargo de enfrentar a Sergio Goycochea para terminar dándole el título a los suyos. Un disparo que contó con muchas aristas ya que, aunque siempre pateaba con la zurda (era ambidiestro), lo ejecutó con la diestra ya que había recibido un golpe en su pierna favorita.
Como si fuera poco, Brehme era el tercer pateador designado: el primero era Lothar Matthäus, quien estar falto de confianza para encarar el disparo, mientras que el segundo era el delantero Rudi Völler, a quien Néstor Sensini le había "cometido" la infracción, pero el DT Franz Beckenbauer -fallecido a principios de este año- consideraba que el que recibió la falta dentro del área nunca debía patear el penal señalado.
Brehme también jugó tres Eurocopas (1984, 1988 y 1992) y unos Juegos Olímpicos (Los Angeles 1984), aunque sin títulos y capitaneando a los suyos en la recordada edición continental de 1992, con derrota en la final ante la sorprendente Dinamarca de Schmeichel, Laudrup y compañía.
A nivel clubes, Brehme se destacó en Kaiserlautern (319 partidos y 53 goles), Inter de Milán (155 y 12) y Bayern Múnich (80 y 8), entre otros. Con el Kaiserlautern, ya veterano, consiguió la proeza de ascender (1997) y ser campeón de la Bundesliga al año siguiente (1998), en tanto que también fue campeón alemán con el Bayern (1987) y de Italia con el Inter (1989), con el que también se coronó en la Copa UEFA (1991).
La muerte de Brehme se produjo pocas semanas después de la de Franz Beckenbauer, el máximo ídolo del fútbol alemán. Tras el fallecimiento de su exDT, Brehme dijo que creía que el Kaiser "formará con Pelé y Maradona un triángulo mágico en el cielo".