"Plan de retiro", comedia con un poco de acción

5 - PLAN DE RETIRO
(The Retirement Plan/Estados Unidos, 2023)
Dirección y Guión: Tim J. Brown
Duración: 109 minutos
Intérpretes: Nicolas Cage, Ron Perlman, Ashley Greene, Jackie Earlie Haley y Ernie Hudson
Estreno en salas

¿Qué dirá la Historia sobre Nicolas Cage? ¿Habrá lugar para radiografiar las mil y un vueltas de la vida de un hombre que luce siempre pasado de vueltas, que ha hecho de la mayoría de sus apariciones públicas un show que pendula entre lo circense, lo histriónico y lo bizarro? El muchachito empezó gracias a las puertas que le abrió su tío Francis Ford Coppola, alcanzó su consagración con el Oscar de 1996 por Adiós a Las Vegas, luego se endeudó hasta lo imposible y tuvo que pagar las cuentas aceptando cuanto guion le pusieran adelante. Finalmente, encontró un segundo aire en proyectos que, lejos de maniatarlo, le exprimen hasta la última gota a su impronta de tipo común al borde del estallido. Cage ha reaparecido en la cartelera comercial luego de años de ausencia. A su protagónico en Renfield y su cameo en Flash durante el año pasado, en estos primeros cincuenta días del 2024 ya se lo vio El hombre de los sueños y, ahora, en Plan de retiro.

Ambas películas exhiben dos de las varias facetas del hombre que fue meme antes de que se adoptara ese término. En el film de Kristoffer Borgli, estrenado el 1º de febrero, está en modo full atribulado y un tanto neurótico como ese profesor universitario de vida gris que de repente aparece en sueños ajenos, un rol que recuerda al de El ladrón de orquídeas. Aquí, en cambio, se lo ve mucho más relajado y superado en la piel de Matt, un tipo medio hippie, pelilargo y canoso, que disfruta las bondades de la jubilación en las Islas Caimán. Pero a miles de kilómetros de distancia, el novio de su hija Ashley no tuvo mejor idea que meterse con una organización criminal robándole la preciada información que guardaban en un pendrive.

Dado que el muchacho es escurridizo y no pueden encontrarlo, deciden pegarle donde más le duele secuestrando a su hija Sarah, es decir, a la nieta de Matt. Una nena a la que desconoce por completo, en tanto se distanció hace años de su hija. Aunque no quiera, Ashley sabe que su única alternativa, la única posibilidad de remontar lo a priori irremontable, es recurrir a Matt. Y hacia las paradisíacas islas irán todos: Ashley, sí, pero también los malhechores que secuestraron a la nena, encabezados por el personaje de Ron Perlman y hasta algunos agentes policiales cuyas dobles intenciones se huelen apenas aparecen en pantalla.

Es el puntapié para una comedia de acción que funciona alguito mejor cuando es lo primero que en los momentos en los que aspira a ser lo segundo. Cage aporta lo suyo como ese hombre desfachatado que siempre parece tener todo bajo control. Pero la trama se vuelve endeble cuando intenta ir más allá de sus peripecias, algo que corona con una sucesión de traiciones en el desenlace de un espíritu demasiado serio para lo que pedía la película.